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El desafío del voto joven

Veinteañeros al rescate de los partidos clásicos

PP, PSPV, Compromís y EU recurren a carteles locales renovados para frenar la fuga de votantes jóvenes a Podemos y Ciudadanos

Veinteañeros al rescate de los partidos clásicos

Hay quien ve la juventud como una virtud; otros, como una enfermedad que se cura con los años. De un modo u otro, la desafección hacia la clase política, la desconexión de los partidos tradicionales con el nuevo electorado y el auge de los recientes fenómenos político-televisivos han llevado a PP, PSPV, Compromís y EU a mirar sin complejos hacia sus cuadros más jóvenes. Revolución u operación de maquillaje, lo cierto es que cuatro chavales recién llegados a la veintena lideran las aspiraciones de los partidos clásicos en sus municipios. Son los candidatos más jóvenes de la Comunitat Valenciana.

El PP tiene dos problemas con los jóvenes. El primero se llama 4,3 %; el segundo, Ciudadanos. Según el CIS, el PP no llega al 5 % de intención de voto en la franja de edad de 18 a 24 años. Es la punta del iceberg de un problema mayor: hasta pasar la barrera de los 45 años, no supera el 10 % de apoyos, y sólo es claramente mayoritario a partir de los 65 años. ¿Qué ha pasado en un partido que en 2011 estaba en el 30 % de apoyos entre los más jóvenes? «La izquierda ha abanderado la juventud, la calle. El PP no ha sabido comunicar. Con temas como el aborto, por ejemplo, los más liberales pensamos: ¿por qué no dejamos las cosas como están?». Emilio Belencoso, estudiante de Derecho recién cumplidos los 22 años, es el candidato del PP en Almàssera.

Belencoso forma parte de los veinteañeros que Fabra ha reclutado para municipios de menos de 20.000 habitantes. Nàquera, Bocairent, Corbera, Albalat de la Ribera, Almussafes, Castelló de Rugat... Fabra se ha lanzado a por el voto joven con agresivas promesas de empleo: un plan de 300 millones y pago de cuotas de seguridad social si se contrata a jóvenes. Y también renovando las listas en las Corts, con currículos vírgenes como el de la bloguera Maria Bernal o el líder de NNGG Juan Carlos Caballero.

«Pensaba que me verían como a un chaval, pero me dicen por la calle: 'Ya era hora que entrara gente joven'. La gente se toma bien la frescura». Belencoso, con todo, se encuentra con la misma desconfianza que los mayores: «Esto es un municipio y todo el mundo me conoce, sabe como soy. Hemos ido juntos al instituto, hemos jugado al fútbol... Saben que políticos hay muchos y por cuatro lo pagamos todos». El reto del PP es contrarrestar a Ciudadanos, un partido que seduce a sus votantes jóvenes con una imagen de regeneración, pero también con posiciones abiertas en materias como la prostitución o las drogas. «Ciudadanos es el partido de los 'despechados' del PP, donde se van los enfadados o los que han perdido», ataca Belencoso. El candidato, en campaña, aprovecha el foco: «Y son catalanistas. Buscan la unidad de la lengua».

Si el PP, mira de reojo a Ciudadanos, el PSPV batalla por conservar la hegemonía de la izquierda, sobre todo entre una juventud que ve en Podemos la respuesta a su cabreo: «¿Casta? Soy de la casta de mi padre que trabaja en un taller; de la casta de estar desde segundo poniendo copas para ayudar y con la responsabilidad de no suspender porque te juegas la beca».

Tania Baños, economista y máster en Tributación, es la alternativa de 24 años para el PSPV en la Vall d'Uixó. Es un caso extraordinario de precocidad, pero no único. Puig ha fiado a treintañeros el asalto a grandes municipios. Roger Cerdà (36) en Xàtiva; Diana Morant (34) en Gandia; Jordi Mayor (34) en Cullera; Isabel Aguilar (26) en Alzira. El «lifting» también ha llegado a la lista de las Corts, con independientes y jóvenes como José Muñoz o Sandra Gómez en Valencia.

«Massa jove», ha escuchado Tania en la Vall d'Uixó: «Si somos buenos para irnos al extranjero sin un duro también lo somos para liderar proyectos en nuestro ayuntamiento», responde. La candidata pide paso para su generación, pero también un cambio de modos: «Si los jóvenes vamos a entrar a hacer lo mismo no nos van a creer. La politica tiene que cambiar».

Y con esta edad, ¿por qué el PSPV y no Podemos? Baños tira de pragmatismo: «Me gusta ser realista y cambiar las cosas de verdad. Y el PSOE lo ha hecho». En materia juvenil, la gran apuesta de Puig pasa por un plan de retorno para los jóvenes exiliados por la crisis.

Tania es de la generación del «No nos falles». Se afilió tras la primera legislatura de ZP, la de los derechos sociales que hoy reivindica. «Al terminar el instituto pedí a mis padres que me llevaran al mitin de Zapatero de la reelección». Y tras lo visto desde 2008, ¿por qué el PSPV y no Podemos? «Entiendo la frustración de la gente, el voto de castigo, cuando ves que la política no cambia la vida de las personas, pero cuando hay tanto que cambiar no puedes mentir a la gente diciendo que todo va a ir fenomenal».

El surgimiento de Podemos es el principal dolor de cabeza de los partidos de izquierda, que luchan por mantener su legitimidad ante el electorado, aunque el daño sea menor en los municipios por la ausencia del partido de Iglesias.

El reto de los socialistas, en palabras de la candidata, es que el PSOE «vuelva a ser el partido de moda». Tienen faena. El 39,5% de jóvenes de 18 a 24 que apoyaba a ZP en 2008 está en 2015 en el 13%; Podemos, en el 27%.

«A veces desde Podemos dicen que se hace algo por primera vez, como las listas abiertas, las asambleas con colectivos... Llevamos décadas haciéndolo». David Moreno, candidato de Esquerra Unida en Museros (6.300 habitantes), no oculta que el discurso 'podemita' en ocasiones resulta «irritante». Moreno es un chico «normal». Tanto, que Levante-EMV le interrumpe en medio de unas prácticas de Química. Acaba de estar de Erasmus. Lo propio a los 21 años. «Esto me ha llegado por casualidad, después de ir asumiendo cada vez más trabajo en el partido, pero yo tengo mi profesión: quiero ser químico. Ser candidato o de cargo público un tiempo es algo puntual», explica.

EU, de hecho, es el partido más crítico contra la profesionalización de la política. También ha sido el más aludido por el golpe al tablero que supone la aparición de Podemos. Y también ha sido el más radical en el proceso de rejuvenecimiento. Alberto Garzón lidera IU con 28 años; en las Corts, Ignacio Blanco es 24 años más joven que su antecesora. Paradójicamente, Podemos, el nuevo partido contra «lo viejo» que ha convertido a IU en algo caduco, tiene líderes bastante más veteranos.

EU, como el resto de partidos tradicionales, tiene un problema con el voto joven. ¿Cómo afrontar el tsunami? «Quizá EU no ha sabido comunicar bien. La lucha contra la corrupción que llevan a cabo el grupo parlamentario no se refleja en las encuestas», lamenta.

El camino de David Moreno a la política lo marcó la senda del 15-M, los golpes a los chavales del Lluís Vives y la militancia universitaria. De ahí a EU, tras la Primavera Valenciana: «Las organizaciones del pueblo no me representaban». Moreno respeta al partido que ha decretado el fin de las ideologías „«yo quería la confluencia», reconoce„, pero reivindica sus siglas sin complejos. «Podemos tiene mucho apoyo de los medios, pero EU está en todas las reivindicaciones sociales». Más que la edad, dice, «importan los ideales».

«La gente que me acusa de inexperiencia no sabe que estuve años traduciendo los plenos». Kika Marchán, 24 años y candidata a la alcaldía de la Vila Joisa, reivindica la preparación de los jóvenes. Licenciada en Filología catalana y máster de Secundaria, su experiencia, como la de miles de jóvenes, se reduce a unas prácticas. Aunque en su caso, como técnico lingüístico en el ayuntamiento, le han servido para meterse de lleno en la política.

Si EU corre el riesgo de verse sustituida por Podemos, en Compromís también recelan del frenazo que apuntan las encuestas. «Opino que son unos vendedores de humo», dispara Kika Marchán. Y remata: «No creo en los mesías». Compromís también se ha apuntado a la tendencia de promocionar a recién llegados a la edad adulta. Como Marchán, los candidatos de la coalación en Ondara, la Pobla Llarga o Almenara tienen entre 24 y 26 años. Algunos que ya son referentes, como Jordi Juan (Tavernes) o la diputada Mireia Mollà (Elx) no superan los 32.

«Está claro que hace falta regeneración, pero no nos han puesto solo por ser jóvenes. Hemos hecho primarias y nos han votado», defiende la joven de la Marina Baixa. ¿Por qué un partido recién llegado a la política amenaza el espacio de otro con 400 concejales? «Compromís no dice nada que no podamos hacer. Eso nos resta votos contra los que venden humo».

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