La Conselleria de Educación, actualmente en funciones tras las elecciones autonómicas del pasado domingo, planea vincular las becas de comedor y transporte escolar al respeto por parte del alumnado beneficiario de la Ley de Señas de Identidad del Pueblo Valenciano. Así se desprende de los proyectos de orden para la modificación de las bases reguladoras de ambas ayudas que el departamento de la consellera Mª José Català presentó ayer ante la Mesa de Padres, en la que participan las tres confederaciones autonómicas de Ampa de la Comunitat Valenciana.
Esta reforma, que afectará a la convocatoria de concesión de becas de transporte y comedor escolar del próximo curso 2015-16, incorpora «como un supuesto de pérdida del derecho al cobro de la subvención y de reintegro de la misma», que la ayuda «sea destinada a la realización de una actividad, o al cumplimiento de una finalidad, que manifiestamente supongan un agravio o menosprecio hacia las señas de identidad del pueblo valenciano».
Menores de edad
Si bien la polémica ley identitaria, aprobada por el PP en solitario en el último pleno de esta legislatura, obliga introducir el respeto a una veintena de señas valencianas (ver claves) «en las bases de cada una de las convocatorias de subvenciones públicas» en este caso llama la atención que se aplique a menores de edad, pues los preceptores de las becas son alumnos de 3 a 16 años (desde Infantil hasta Educación Secundaria Obligatoria).
Estos borradores, junto al de ayudas a los colegios e institutos para proyectos de innovación educativa que ya avanzó Levante-EMV, son los primeros en los que se aplica la Ley de Señas de Identidad, que entró en vigor el pasado 3 de abril. Esto se debe a que todas las convocatorias de becas y subvenciones para el próximo curso escolar han de aprobarse antes de que finalice el actual ejercicio el próximo mes.
La confederación autonómica de Ampa Gonzalo Anaya ha exigido en la Mesa de Padres que la conselleria retire del borrador que las becas dependan del respeto a la Ley de señas. «Es lamentable que se mezcle la comida de los niños con los símbolos identitarios», destacan fuentes de esta confederación mayoritaria en la escuela pública de la C. Valenciana. Además, añaden, que resulta «más doloroso si cabe que se quiera incorporar dicho condicionante a las becas de comedor, pues estas se han convertido en ayudas asistenciales para familias con pocos recursos».
El presidente de la Associació Valenciana de Directors d´Infantil i Primària (Avdip) de la escuela pública, Vicent Ripoll, por su parte, considera que el borrador elaborado por Educación «no tiene ningún sentido, pues la beca de comedor es finalista ya que se destina integramente al pago del menú „y no lo cubre todo (la ayuda es de 3,94 euros alumno y día cuando el precio de la minuta es de 4,25 euros en los colegios públicos)„, por lo que no hay posibilidad alguna de infringir la Ley de Señas de Identidad». Ripoll insta a corregir rápido dicho «error» porque «es clave» que las familias puedan solicitar las becas antes de que acabe el curso el próximo19 de junio.
