El nuevo presidente de la Generalitat, el socialista Ximo Puig, tomará posesión del cargo mañana en las Corts ante la presencia del notario mayor del Reino, el ministro de Justicia, Rafael Catalá. No era el primer plan del Ejecutivo de Rajoy, sino la solución adoptada anoche, tras el incendio político causado por el anuncio de que sería el titular de Hacienda, Cristóbal Montoro, quien representaría al Gobierno en el acto solemne del Palau de Benicarló. Montoro ha sido protagonista de los desaires más sonados al Ejecutivo de Alberto Fabra y a los empresarios valencianos por la financiación y que, en los últimos días, ha lanzado serias advertencias a las comunidades, en particular a la valenciana, para que no descontrolen el déficit, coincidiendo con el cambio de color político tras el 24M. El 23 de junio, a dos días de la investidura de Puig, Hacienda amenazó al Consell con recortar la financiación por la morosidad.

El anuncio de Moncloa generó una tormenta política en el PP valenciano y en los socios del Consell, socialistas y Compromís. Tal fue la polémica que horas después de lanzar su nombre tuvieron que rectificar y proponer a Rafael Catalá. El Gobierno había lanzado la rectificación en las agencias de noticias. Para coronar la confusión, fuentes del Ministerio de Defensa advirtieron a última horade que no está en absoluto garantizada la asistencia de Català. De hecho, en la agenda de los ministro no constaba.

La decisión de Rajoy de enviar una representación al más alto nivel contrasta con el vacío que el PP nacional hizo a los presidentes populares valencianos. En 2007, antes de Gürtel, nadie de la dirección nacional asistió a la toma de posesión de Camps, el 27 de junio de aquel año, a diferencia de lo que había sucedido días antes con Esperanza Aguirre. Por el Gobierno socialista sí estuvo el ministro de Educación, Ángel Gabilondo. Y el 21 de junio de 2011, en el juramento de Camps, solo asistió el valenciano y vicesecretario de Comunicación, Esteban González Pons; por el Ejecutivo socialista, estuvo la ministra de Sanidad,Leire Pajín. Tras la dimisión de Camps, en la toma de posesión de Fabra, el 28 de julio, no acudió nadie de Madrid.

Puig: «Rajoy nos discrimina»

Puig estará arropado mañana por el líder del PSOE, Pedro Sánchez, el expresidente Zapatero y Ángel Gabilondo, que repite. En su discurso de investidura del jueves, Puig propuso un pacto para exigir al Gobierno un cambio en el sistema de financiación, un fondo transitorio para este año (que sería de 1.500 millones) para compensar este año la infrafinanciación y la negociación de la deuda histórica de 16.000 millones. Si todo ello no se logra vía negociación, acudirán a los tribunales, avisó. Ayer, Puig reiteró que el lunes pedirá una entrevista a Rajoy «porque la mejora de la financiación es una cuestión básica para el nuevo Consell».