Alberto Fabra, líder del PPCV y actual portavoz en las Corts, se acogerá al estatuto de los expresidentes de la Generalitat, lo que comporta que la actual Ejecutivo de socialistas y Compromís deberá poner a su disposición un despacho y un coche oficial, al tiempo que tendrá derecho a escolta, chófer y dos puestos de asesores, entre los que estará la exsecretaria autonómica de Presidencia, Esther Pastor.

Todavía no se sabe dónde se ubicará la oficina de Fabra como exmandatario autonómico, aunque es seguro que no estará en el Consell Jurídic Consultiu. Allí tiene despacho el también exjefe del Consell Francisco Camps, quien hizo uso del puesto como miembro nata del CJC (con sueldo de conseller) que garantiza a los exresponsables autonómicos la ley de expresidentes de la Generalitat. Y es que Fabra no hará uso de esta vocalía, si bien su futuro lo tiene resuelto, toda vez que ocupará uno de los dos puestos de senador territorial a propuesta del PP que se elegirán el próximo 22 de julio. La puesta a disposición de estos medios está pendiente de que la firme el presidente del Consell, Ximo Puig.

Alternativa a Císcar en Alicante

Así las cosas, Fabra, quien ayer presidió la reunión del grupo popular en las Corts, apoyó que el PP proponga otro candidato a la Diputación de Alicante, en lugar de José Císcar, para propiciar que Ciudadanos vote o se abstenga y los populares mantengan la corporación. Fabra avanzó que el PP se abstendrá mañana en la elección del nuevo presidente de las Corts y pidió a PSPV y Compromís «respeto» por la institución, «usada en las negociaciones para el Consell».