La anterior legislatura acabó en la diputación de la forma más convulsa posible, con un presidente (Alfonso Rus) que se fugó para refugiarse en Xàtiva cuando arreciaba la tempestad y las grabaciones del caso Imelsa y un fugado, Marcos Benavent (exgerente de la empresa pública), que tuvo que regresar de Ecuador y apareció en el juzgado para declararse «yonqui del dinero». El vicepresidente Máximo Caturla fue otra de las víctimas dimitidas por el escándalo y Juan José Medina tuvo que asumir las riendas de urgencia.

La actual etapa, la que preside ya el socialista Jorge Rodríguez, ha arrancado, en cambio, con paz y unanimidades balsámicas en todas las votaciones del primer pleno de esta legislatura, celebrado ayer, y que sirvió para aprobar la estructura del nuevo gobierno, el reparto de delegaciones y la reducción del número de asesores y de sueldos, avanzadas por Levante-EMV. En el pacto de gobierno suscrito por PSPV y Compromís, al que ahora se han incorporado Esquerra Unida y València en Comú, se contemplaba que nadie (diputados, cargos de confianza, personal del gabinete del presidente, y asesores técnicos) gane más que el jefe del Consell, cuyo sueldo asciende a 67.615 euros. El presidente de la diputación percibía hasta ahora 73. 136. Jorge Rodríguez se lo reduce un 10%. Los doce diputados del PP votaron, al igual que los dos de Ciudadanos, a favor de esa rebaja salarial. Una reducción que no había sido aplicada pese a que el anterior inquilino del Palau, Alberto Fabra, ya se pronunció a favor de un ajuste salarial tomando como listón el sueldo del Molt Honorable. Esa consigna había sido secundada de palabra, pero no de obra.

El alcalde de Ontinyent inicia su mandato con buen pie. Populares y Ciudadanos votaron también a favor de la reducción del número de asesores a un total de 41, cinco menos que en la etapa anterior gracias a que se eliminan los 9 asesores de los consejeros de administración de la empresa pública Imelsa, cuya constitución del consejo de administración no se llevó a cabo ayer por problemas burocráticos.

Nofuentes gestiona las compras

También se registraron 31 síes en la votación de la nueva estructura del gobierno provincial, que incluye presidente y hasta ocho vicepresidencias, frente a las seis anteriores. Serán vicepresidentes, por orden de prelación, Maria Josep Amigó (Compromís), Toni Gaspar (PSPV), Emili Altur (Compromís), Rosa Pérez (EU), José Ruiz (PSPV), Roberto Jaramillo (València en Comú), Xavier Rius (Compromís) y la socialista Mercedes Berenguer, que será vicepresidenta octava. La diputada de Esquerra Unida, Rosa Pérez, llevará Teatres y Bienestar Social y el de València en Comú, Roberto Jaramillo, Transparencia. La Central de Compras provincial será gestionada por el socialista Bartolomé Nofuentes, mientras que su compañera Conxa Garcia se encargará de los Planes de Empleo y transferencias a la Generalitat.