Las grabaciones que sacudieron en abril y mayo los cimientos del Partido Popular en la provincia de Valencia y que han acabado con la carrera política de los primeros espadas de la formación ya tienen validez judicial. El exgerente de Imelsa y delfín de Alfonso Rus durante años, Marcos Benavent, ha ratificado en el juzgado la veracidad de las diez horas de grabación aportadas a la causa por EU en la Diputación de Valencia, según han confirmado a Levante-EMV varias fuentes conocedoras de la investigación.
Benavent, como autor e interlocutor de todas las grabaciones, era el único que podía ratificarlas ante la justicia, para que permitan «seguir tirando del hilo» en la trama de comisiones y mordidas urdida, presuntamente, por el ex presidente provincial del PP, Alfonso Rus, y su equipo de colaboradores.
Una situación similar se produjo en macrocausas judiciales relacionadas con la Comunitat Valenciana. En el Caso Terra Mítica, fueron los diputados socialistas José Camarasa y Antoni Such quienes aportaron al juzgado las cintas „grabadas por ellos„ en las que varios empresarios admitían el cobro de comisiones y la emisión de facturas falsas durante la construcción del parque temático. Un esquema que se produjo en el Caso Gürtel, armado gracias a las grabaciones realizadas y aportadas por el ex concejal del PP de Majadahonda, José Luis Peña. Los abogados de los imputados en ambas causas aún intentan que se anule toda la información obtenida a partir de estas grabaciones, aunque todos los intentos han sido, por ahora, infructosos porque fueron aportados por uno de los interlocutores en las conversaciones aportadas ante la justicia, como ahora ha sucedido con las ratificadas por Marcos Benavent. De esta manera, el famoso conteo «3.000, 4.000, 5.000... Dos milions de peles», los «Reyes Magos» de «9.000 euros para dos regalitos y cuatro fiestas» que llegaron a manos de la concejala del Ayuntamiento de Valencia, Maria José Alcón, en forma de mordida entregada por Benavent o la presunta financiación irregular del PP [«He dejado 5.000 euros para el partido porque Alfonso [lo] ha querido así»] podría provocar una retahíla de imputaciones y permitir abrir nuevas líneas de investigación para aclarar las supuestas mordidas en la Diputación y el Ayuntamiento de Valencia, la concesión de residencias, la construcción de viviendas de protección oficial (VPO) o la adjudicación de programas de actuación integrada (PAI) en administraciones y empresas públicas gobernadas por el PP. Las diez horas de grabaciones en manos de la Fiscalía, validadas por Benavent, combinadas con la documentación contable y mercantil sustraída por el exgerente y entregada al juez tras su reaparición acreditan la operativa de la presunta trama orquestada en el entorno de Rus.
