Hay vida más allá de la política. Que se lo pregunten a la exvicepresidenta de la Diputación de Castelló, Esther Pallardó, quien ha tenido que reinventarse tras su salida del PP por la puerta trasera. Ahora se ha lanzado al mundo de la moda con una línea de camisetas infantiles ilustradas por Ripollés, amigo íntimo de su novio Carlos Fabra.

Pallardó ha cubierto en un tiempo récord el tránsito entre la vida política y la civil. Hace apenas un mes acaparaba titulares por el expediente de expulsión que le abrió el PP tras descubrir sus confabulaciones en contra del presidente provincial, Javier Moliner, a través de perfiles falsos en las redes sociales. Antes de que se consumara la expulsión, Pallardó se dio de baja del partido, cerrando un capítulo de su vida que duró 12 años.

La exvicepresidenta de la diputación se ha convertido en una emprendedora de la moda infantil y comparte aventura con Gloria Fandos. Ambas coincidieron como concejalas en el Ayuntamiento de Borriana. Recientemente lanzaron la firma Keep Happy, en la que aseguran haber puesto «toda la ilusión del mundo y muchísimo trabajo». A través de la web ofertan camisetas infantiles con frases relativas «a la felicidad y el buen rollo». La colección de lanzamiento, Keep Happy By Ripo, cuenta con ilustraciones de Juan Ripollés. Suya es la colosal y célebre escultura del aeropuerto, inspirada en el propio Fabra, el expresidente provincial del PP y de la diputación que cumple condena en la cárcel de Aranjuez por fraude fiscal.

Todas las camisetas de esta primera colección, con precios de 25 y 35 euros, llevan de regalo una lámina de Ripollés y un certificado de autenticidad. Las empresarias garantizan su toque personal en cada prenda: «Pequeños detalles, ondulinas, lazos, piconelas, algún brillantito por aquí, una puntillita por allá y ¡voilà!».

Los mensajes almibarados y melifluos de la diseñadora contrastan con el carácter implacable que mostró en los años en que ejerció de «dama de hierro» del PP castellonense. Pallardó busca labrarse un futuro en el campo de la moda, incorporando a sus diseños el universo de mariposas, corazones y figuras patatamorfas de Ripollés. Se despide de sus potenciales clientes con «un beso Happy».