Frustración es poco para definir la situación que viven los candidatos en lista de espera al programa VALi+d de la Conselleria de Educación para que las universidades públicas y los centros de investigación de la Comunitat Valenciana contraten durante tres años a personal investigador de carácter predoctoral. Su angustia la resume Miguel Morard, joven bioinformático que es el primero en la bolsa de reserva del área de Ciencia y Tecnología de Alimentos, al ver que «por 15 días se va a perder un contrato de 36 meses» que es vital para su futuro.
Miguel teme que, como ocurrió el año pasado con 10 becas VALi+d, la conselleria no cubra las 29 renuncias que se esperan a los 63 contratos predoctorales adjudicados el pasado junio por ser incompatibles con la beca de Formación del Profesorado Universitario (FPU) que acaba de fallar del Ministerio de Educación. Si esto se repite la Generalitat dejaría de ejecutar 1,9 de los 4,2 millones de euros en ayudas a la contratación de investigadores en formación durante los próximos tres años.
La anterior conselleria de Educación de Mª José Català adjudicó los 63 contratos predoctorales VALi+d de la convocatoria de 2014 el pasado 11 de junio, dejando a 233 doctorandos en lista de espera. En total son 4,2 millones que recibirán las universidades y centros investigadores para financiar los contratos de los predoc y sus cuotas de la Seguridad Social. La subvención, que cubre el segundo semestre de este año, todo 2016 y 2017 y la primera mitad de 2018, suma 66.192,8 euros por investigador en formación, unos 1.838 euros brutos al mes.
El uno de julio, el mismo día en que los becarios VALi+d firmaron sus contratos, expiró el plazo que marca la convocatoria de la conselleria para renunciar a estas becas. La principal causa de desistimiento a este programa es la obtención de otra ayuda incompatible, como la FPU del ministerio, que es de mayor cuantía y duración. Estos contratos predoctorales son para cuatro años y constan de 1.025 euros mensuales por 14 pagas anuales, durante los dos primeros años, y 1.173 euros al mes por 14 pagas, durante el tercer y cuarto año.
Retraso de las FPU del ministerio
El ministerio publicó este pasado jueves 16 de julio, más de dos semanas después de lo previsto, la relación provisional de las 800 ayudas FPU de la convocatoria de 2014. Morard, que pertenece a la Federación Española de Biotecnólogos (FEBiotec), subraya que «en el listado de becarios FPU hay 29 beneficiarios de contratos VALi+d, por lo que si la conselleria sigue la pauta del año pasado se perderían casi la mitad (46 %) de las plazas ofertadas, por solo 15 días de diferencias en los plazos».
«No estamos pidiendo más recursos para la investigación, que sin duda es necesario, sino que se gaste lo que se ha presupuestado», alerta la FEBiotec ante la previsible no reposición de las becas desiertas.
Falta de interlocutor
Esta organización ha iniciado una campaña en internet en la que casi 500 personas han firmado la petición para que la conselleria se comprometa «a cubrir las plazas de contratos predoctorales del programa VALi+d después de la resolución de las becas FPU». Petición que Morard entregó en mano al nuevo conseller de Educación, Vicent Marzà, el pasado 30 de junio tras su toma de posesión, y de la que no ha recibido respuesta. La preocupación aumenta ante la falta de interlocutor pues dos semanas después del nombramiento de todos los directores generales de Educación, Marzà sigue sin designar al responsable de Universidad, Investigación y Ciencia.
Otra afectada por descoordinación entre Gobierno y Generalitat, Yolanda Campos, segunda en la lista de espera de VALi+d de Biomedicina, lamenta la pasividad de la conselleria: «intentamos hablar con el director general de Universiades, pero no lo han nombrado, y un funcionario nos respondió que no se podía ampliar hasta el infinito el plazo para sustituir las posibles renuncias».
