El claustro de la Universistat de València (UV) aprobó ayer „por 104 votos a favor, ninguno en contra y cuatro abstenciones„ una declaración que insta a la Consellería de Educación a bajar las tasas académicas de cara al curso que arranca en septiembre. La propuesta, presentada por un grupo de 51 claustrales hace cinco meses, reclama un descenso anual de los precios del 8,4 % durante los próximos tres años con el fin de volver a las tasas anteriores al Real Decreto-ley 14/2012 de medidas urgentes de racionalización del gasto público en el ámbito educativo.

Este decretazo del Gobierno permitió al anterior Consell del PP encarecer las tasas de las cinco universidades públicas de la C. Valenciana un 94 %. El último informe de la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE), subraya que el aumento de precios del Sistema Universitario Público Valenciano (SUPV) ha sido el tercero más elevado, convirtiéndolo en el cuarto más caro del país. El profesor José Manuel Rodríguez, representante de los autores de la declaración, denuncia que la subida de tasas «ha expulsado de la universidad a los estudiantes de las familias con menos recursos».

El rector de la UV, Esteban Morcillo, que respaldó la declaración del claustro en favor de la bajada de tasas, insta a la conselleria «a mover ficha pronto, pues los alumnos ya se están matriculando y los primeros recibos les van a llegar entre octubre y noviembre». La competencia de fijar las tasas universitarias valencianas es exclusiva de la Generalitat, dentro de la horquilla que le marca el Ministerio de Educación de entre el 15 y el 25 % del coste de los estudios.

Según explicó Morcillo, «la postura común y compartida de los rectores de las cinco universidades públicas es que necesariamente la conselleria debe revisar las tasas pero sin disociarlas de la financiación universitaria, ni tampoco de las becas». Sobre éstas últimas, opina que para la Generalitat «debe ser una urgencia mejorarlas».

En cuanto a la financiación del Consell, el rector de la UV estima que «una bajada del 10 % de las tasas supondrá que el conjunto del sistema público universitario deje de ingresar entre 13 y 14 millones de euros, una merma que tendrá que compensar la Generalitat». Tras cinco años de recortes en la aportación del Consell a las universidades, la Universitat ha recibido este año 45 millones menos que en 2010, los presupuestos universitarios ya no admiten más tijeretazos.

Además de la declaración a favor de la bajada de tasas, el claustro también secundó la propuesta del grupo de 51 claustrales para que se limite la carga lectiva de los profesores de la Universitat a un máximo de 24o horas anuales y otra sobre la reducción de la jornada laboral del Personal de Administración y Servicios (PAS) de más de 60 años.

Por otro lado, el claustro también ratificó sin ningún voto en contra „148 a favor y cuatro abstenciones„ el informe de gestión del año 2014 presentado por el rector. Morcillo, además calificó como «satisfactorio» el proceso de inscripción del alumnado para el nuevo curso. «La UV ha cubierto ya el 99,73 % de las 8.750 plazas de primer curso que ofrece en 54 grados y seis dobles titulaciones y, entre los alumnos que han encontrado plaza, el 60 % lo hace en el grado elegido y el 84 % en sus tres primeras opciones», dijo.