La Conselleria de Salud Pública emitió ayer las primeras tarjetas SIP a 14 personas extranjeras en situación irregular, de las 30.000 que se beneficiarían de la nueva medida de Conselleria, después de tres años sin cobertura sanitaria desde la aplicación del Real Decreto en 2012 por el que se excluía a los inmigrantes sin papeles de la asistencia.

Los primeros en obtener las nuevas tarjetas han sido ocho mujeres y seis hombres de entre 25 y 69 años. Tres de ellos procedentes de Paraguay, dos de Argelia, dos de Colombia y otros dos de Nigeria. El resto son originarios de Brasil, Ucrania, Moldavia, Senegal y Guatemala.

La Conselleria introdujo el pasado lunes los cambios en la aplicación informática, y a lo largo de esta semana se han transmitido instrucciones generales a los principales colectivos sanitarios. Ayer se transmitió una información más concreta sobre el las actualizaciones del sistema informático a los departamentos de salud, encargados de la emisión de las nuevas SIP.

Según fuentes de Conselleria, se habría puesto en marcha un tutorial informático para el personal sanitario, ya que tendrán de hacerse cargo de comprobar el cumplimiento de los requisitos de los nuevos usuarios, como demostrar un periodo de empadronamiento no inferior a tres meses en cualquier municipio de la Comunitat Valenciana o carecer de derecho a cobertura sanitaria en su país de origen.

Estas nuevas altas se dieron entre el lunes, día en que estuvo listo el nuevo sistema poblacional, y el jueves, por lo que podrían haber más inmigrantes con tarjeta desde ayer.

A pesar de los datos, la salida de estas nuevas tarjetas se está produciendo de manera desigual. Algunos centros de salud todavía no contaban con instrucciones durante la anterior jornada. En la provincia de Valencia, centros como el de Alfafar o Mislata no contaban con más información, como tampoco los de algunos barrios de la capital, como el Salvador Allende de Orriols o el Nou Moles en el distrito de l'Olivereta.

Sin embargo, la medida ya dio sus primeros frutos días después de su anuncio, ya que tras una reclamación, el Hospital La Fe no hizo efectivo el compromiso de pago de una mujer que acudió a urgencias con su hija menor de edad. Esta inmigrante, que entraría dentro de los requisitos para adquirir una tarjeta sanitaria tras la nueva política de la Conselleria, contó con el asesoramiento de Valencia Acoge, asociación comprometida con la integración de la población extranjera, quien no ha dudado en expresar su satisfacción. «A pesar de que los cambios se están produciendo poco a poco, esto no ha generado malestar entre los candidatos a obtener la tarjeta. Han asumido bien el proceso, aunque están pendientes. Hubo gente que ya se acercó el lunes a preguntar», según una trabajadora social del colectivo.

El Consell aprobó ayer el decreto ley de Sanidad Universal que reforzaría la medida adoptada ya por Montón el pasado día 16, mediante la que se pretende acabar con el «modelo discriminatorio de Sanidad que había implantado el PP en la Comunitat Valenciana», según afirmó la consellera en una rueda de prensa.