Un juzgado de Valencia ha rechazado la pretensión del exgerente de Avialsa de cobrar 1,5 millones de la empresa de la que se fue en 2012 por, según alegaba en su demanda, bonus, nóminas y pagas extras no abonadas y que le pertenecían. El juez, tras estudiar las pruebas y los testimonios, da la razón a la mercantil y rechaza la solicitud del exgerente, Francisco Alandí. El demandante, Alandí, fue precisamente el que destapó la causa contra el exdelegado del Gobierno en la C. Valenciana y exconseller de Gobernación, Serafín Castellano, el presidente de Avialsa, Vicente Huerta, y otras ocho personas por presunta malversación, prevaricación y blanqueo, en relación con supuesta contratación irregular para la extinción de incendios.

Así mismo, Alandí está siendo investigado en otro juzgado por la querella que le interpuso previamente Huerta por presunta estafa durante el tiempo que había estado trabajando en Avialsa y otras empresas del grupo (Holding Empresarial Avialsa; Air Tractor Europe; Aviación Agrícola de Levante; y Airhuerk). Junto a estos dos procedimiento, se tramitaba en otro juzgado la demanda de Alandí contra Avialsa y empresas del grupo, a las que pedía 1,5 millones por salarios impagados. El demandante comenzó a desempeñar labores en estas mercantiles en 1996 como gerente, hasta que en diciembre de 2012 causó baja voluntaria de la empresa Holding Empresarial Avialsa.

Los 1,5 millones reclamados por Alandí los justificó en varios conceptos. El primero, 300.000 euros, por cumplir con objetivos como la licencia de obras para el aeródromo de Viver o el crecimiento internacional del Grupo en el área de extinción de incendios mediante la ampliación del contrato con Portugal.

El juez desestima esta pretensión al ver probado que nunca se pactó con la empresa el abono de un bonus único por estos objetivos, sino que se trata de un documento elaborado por asesores fiscales y Alandí para que los rendimientos del salario tengan menos retención y se pagara menos a Hacienda.

Otra cantidad eran 22.894,50 euros por la nómina de 11 días de diciembre de 2012, y el finiquito por 87.424,91 euros. Sin embargo, y pese a que es cierto que no se abonó, el juez desestima la petición al entender que la empresa no le pagó porque Alandí tenía contraída una deuda contable de 402.304,96 euros. En cuanto a las vacaciones de 2012, que Alandí reclama por 62.685 euros al manifestar que no las ha disfrutado, lo desestima porque la empresa presenta viajes que ha realizado el demandante a cargo de la mercantil que nada tenían que ver con su trabajo.

«El actor —señala— no ha acreditado que ninguno de los viajes fueran de trabajo, es más, en algunos de ellos viajó con su familia». Además, un testigo señaló que a Andorra, Tarragona y San Sebastián (destinos a los que se fue con cargo a la empresa) no viajaba.