El efecto conocido por los expertos como manga marina o desplome «downburst»puso en jaque ayer a la provincia, sobre todo a los municipios de Castelló y Benicàssim. El viento, la lluvia, los truenos y relámpagos sembraron el caos entre los vecinos en la madrugada del sábado que vieron cómo un fuerte temporal se llevaba por delante todo lo que se encontraba por su camino.

La capital de la Plana fue una de las afectadas por el temporal y las lluvias acumuladas de casi 60 litros por metro cuadrado y rachas de viento que alcanzaron los 135 km/hora en algunas zonas, provocaron numerosas incidencias y desperfectos en el arbolado y el mobiliario urbano de Castelló.

La Sala 092 de Seguridad y Emergencias de la Policía Local registró un total de 88 servicios que estuvieron concentrados en el tramo horario de las 00.15 y las 02.30 horas, momento el que se registraron las lluvias torrenciales y las fuertes rachas de viento. Los bomberos municipales realizaron por su parte 65 servicios durante la noche de ayer y en total se registró la caída de más de 200 árboles. Además, la patrulla de atestados confeccionó 15 informes por daños a vehículos por caída de árboles o cascotes ya que se vieron dañados más de 25 vehículos.También se realizaron servicios por caída de postes eléctricos, señales, y contenedores a la vía pública.

Como daños materiales destacan la caseta de madera de la Biblioteca del Mar ubicada en la playa del Gurugú la cual quedó totalmente destrozada debido a las fuertes rachas de viento. La misma fue sustituida durante la mañana de ayer por dos módulos prefabricados para continuar ofreciendo el servicio. Asimismo, el parque de El Pinar permanecerá cerrado al público durante todo el fin de semana, como mínimo, ya que existe un elevado riesgo de caída de pinos y ramas.

El temporal también provocó el corte al tráfico de algunos viales como la Ronda Norte a su paso por la avenida Virgen de Lidon, desde la rotonda de paso del Río Seco hasta la rotonda de la Ciudad de la Justicia, la avenida Enrique Gimeno, la avenida Barcelona, la avenida Sos Baynat o la Cuadra Salera. Durante la tarde de ayer, el tráfico ya estaba restablecido en todos los viales y los trabajos se concentraron en la limpieza de las calles, la retirada de enseres y árboles caídos.

Destrozos en Benicàssim

En el caso de Benicàssim, tanto en la zona de playa como en el casco urbano, el viento ocasionó numerosos destrozos, sobre todo en el arbolado público, toldos de terrazas o tejados de parkings de varios apartamentos. Lo tormenta fue tal que hasta la caída de granizo sorprendió a los vecinos que vieron como se les anegaban las terrazas.

Desde la Policía Local, el intendente jefe, Eugenio Capitán, informó que desde las 00.30 horas yhasta alrededor de las 05.30 horas «fue un no parar». Cuatro coches patrulla, más un vehículo con el intendente y el concejal de Seguridad, Arturo Martí, trabajaron en las zonas más afectadas, centradas sobre todo en la parte sur del municipio como en la pla-ya Heliópolis, camino la Ratlla o Eurosol. Cortes de tráfico de parte de la avenida Ferrandis Salvador, calle Doctor Fleming o Apóstol Santiago durante algunas horas así como algún corte de luz o teléfono fueron otros de los percances ocasionados por el temporal de ayer. Además, el municipio registró la caída de árboles sobre un techado de uralita bajo el que había varios vehículos que quedaron afectados, «pero a pesar de los destrozos ocasionados no hubo que lamentar ningún daño personal», añadió Capitán. La zona del Rototom contó con el levantamiento del vallado.

Los más perjudicados

Sin duda alguna, los más perjudicados fueron los comerciantes del mercado de artesanía instalado desde el pasado día 15 de julio en el paseo marítimo Ferrandis Salvador. Un total de 17 de las 30 casetas en las que vendían sus productos, ubicadas a la altura de la playa de Heliópolis, quedaron completamente destrozadas en apenas unos minutos. La desolación e incertidumbre se reflejaba en los rostros de todos ellos que han perdido gran parte de su mercancía como ropa, complementos o elementos de artesanía. Las perdidas suponen varios miles de euros. Desde la empresa encargada del alquiler de los terrenos así como del alquiler de las casetas informaron que instalarán unas nuevas sin coste para los comerciantes y esperan que el ayuntamiento les autorice alargar un poco la temporada ya que por lo menos este fin de semana no podrán dar servicio.

Pero las consecuencias del temporal se extendieron más allá de Castelló. Las intensas granizadas del viernes por la tarde dejaron cuantiosos daños en l'Alt Vinalopó, l'Alcoià o la Vall d'Albaida y varios heridos. En Muro, un hombre mayor sufrió lesiones leves en la cabeza al recibir el impacto del pedrisco, mientras que un vecino de Bocairent se fracturó un brazo por el mismo motivo, según fuentes municipales. Ambos precisaron de atención médica. En esta última localidad, los talleres de reparación no dieron ayer abasto: más de 200 vehículos resultaron dañados a raíz del granizos, con abolladuras y cristales rotos. En Beneixama, el techo de la nave de la cooperativa quedó totalmente agujereado.