El eurodiputado de Compromís y miembro de la delegación del Magreb en el Parlamento Europeo, Jordi Sebastià, continuó ayer la cadena de huelgas de hambre de 24 horas para que Marruecos devuelva a una mujer saharaui residente en Tenerife, Takbar Haddi, el cadáver de su hijo de 21 años que murió en febrero tras pasar 48 horas en prisión. La familia del joven denuncia que éste fue apuñalado por colonos marroquíes y falleció al no recibir asistencia médica.