Nuevo caso de envenenamiento de perros. Una vecina de Picassent denunciaba anteayer ante la Guardia Civil el fallecimiento de su perra tras ingerir carne cruda picada con bolas negras de un producto tóxico que le ha provocado la muerte, pese a recibir tratamiento clínico en un hospital veterinario. Boira no pudo superar los efectos que le causó el veneno ingerido y falleció tres días después, tras entrar en parada cardio-respiratoria. La muerte de esta perra no es la única en la localidad y en apenas unos meses han fallecido otros tres perros y cuatro gatos. Además, hubo otro intento de intoxicación, aunque en este caso el perro salió ileso. Se investiga ahora al autor o autores de estos ataques.

La propietaria de Boira, una perra mestiza de 4 años, denunció los hechos el viernes ante la Guardia Civil de Picassent. Según detalla en la denuncia, los hechos ocurrieron el sábado de la semana pasada cuando paseando a la perra por el descampado situado entre la calle Primer Desmonte y la calle Libertad de Picassent, el animal ingirió la carne envenenada. La dueña de la perra remarca el carácter «letal» del producto utilizado y los inmediatos efectos dañinos, ya que apenas dos minutos después de ingerir la carne, Boira comenzó a salivar «exageradamente» y «vomitar» la carne, además de «convulsionar» y «expulsar heces líquidas». La perra fue trasladada al hospital veterinario inmediatamente „en menos de 5 minutos„ y, tras analizar la carne envenenada y determinar que se trataba de un «tóxico de la familia de los carbamatos: aldicarb» „según el informe del veterinario al que ha tenido acceso este diario„, le suministraron el tratamiento pertinente. Boira permaneció tres días ingresada, en los que llegó a experimentar alguna mejoría, pero el edema pulmonar motivado por el envenenamiento, así como un cuadro respiratorio asociado acabaron provocándole la muerte.

Además del caso de Boira, en Picassent se han producido en los últimos meses otros tres casos de envenenamiento. Otra vecina de la localidad denunció la muerte de dos perros y cuatro gatos, mientras que en un parque junto al centro cívico de la tercera edad del municipio de l'Horta, una propietaria denunció el envenenamiento de su mascota usando «quesitos que contenían veneno». En este caso el perro no falleció. Además, en la zona del polideportivo se habría producido otro caso de envenenamiento que también se estaría investigando.

Sospechan de más casos

Los afectados, así como la Protectora de animales de Valencia Modepran, han alertado que podrían producirse más denuncias, ya que al parecer habría más casos de animales domésticos intoxicados. Señalan que gatos errantes se encontrarían también entre las víctimas de este ataque. Advierten, además, del peligro de otros daños, ya que junto al descampado en el que fue envenenada Boira hay un parque infantil. Desde Modepran, Amparo Requena „que señaló que se trata de un veneno «muy potente, con efectos inmediatos»„, afirmó que estos envenenamientos son un delito a la fauna, así como un delito de maltrato animal, con condenas entre cuatro meses y dos años de prisión. Pidió que no quede impune.