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La diputación detrae 17 millones a Valencia para incrementar la inversión en pueblos pequeños

El plan extraordinario de 71 millones del ente provincial arrancará los trámites en septiembre y destinará 35 euros por habitante excepto en la capital

La diputación detrae 17 millones a Valencia para incrementar la inversión en pueblos pequeños

Los habitantes de los municipios de menos de 1.500 habitantes serán los más beneficiados del Plan Extraordinario de Inversiones Sostenibles de la diputación que repartirá 71 millones de euros antes de que termine 2015. Valencia, que si se contabilizara la partida por vecino debería disponer de más de 22 millones de euros, recibirá alrededor de cinco millones de euros para que todos y cada uno de los pequeños pueblos dispongan de 50.0000 euros, una partida que puede solucionar muchos de su problemas porque prácticamente no tienen dotación presupuestaria. El plan arrancará en septiembre cuando se publiquen las bases de la convocatoria, según comunicó ayer a todos los alcaldes el presidente de la Diputación de Valencia, Jorge Rodríguez.

La iniciativa del ente provincial de invertir 71 millones de euros de superávit de 2014, que de no gastarse habrían ido a amortizar la deuda, dispone de dos correcciones implantadas por el nuevo gobierno PSPV-Compromís de la diputación. Los cinco millones para Valencia y los 50.000 para los ayuntamientos de menos de 1.500 habitantes. Esto permite que el resto de pueblos y ciudades de Valencia tengan para gastar 35 euros por habitante. Es decir, municipios de 20.000 habitantes recibirán alrededor de 700.000 euros y los de 10.000 350.000. Mislata percibirá 1,5 millones y Torrent unos 3, una verdadera inversión en una época en que los planes de estabilidad del Gobierno de Mariano Rajoy para cumplir los objetivos de déficit han secado la iniciativa pública.

La inversiones sostenibles que se podrán acoger a este plan tendrán que estar incluidas en 22 grupos. Saneamiento, abastecimiento y distribución de aguas; recogida, eliminación y tratamiento de residuos; alumbrado público; protección y mejora del medio ambiente; mejora de las estructuras agropecuarias y de los sistemas productivos; industria; energía; comercio; ordenación y promoción turística; promoción, mantenimiento y desarrollo del transporte; recursos hidráulicos; investigación científica; sociedad de la información; gestión del conocimiento; ordenación del tráfico y estacionamiento; vías públicas; parques y jardines; protección del patrimonio; carreteras, caminos vecinales y gestión del patrimonio: aplicadas a la rehabilitación y reparación de infraestructuras e inmuebles propiedad de la entidad local a efectos de servicio público.

Este plan de inversión de 71 millones de euros se realiza para que el superávit de la Diputación de Valencia no acabe en amortización de la deuda, como marca la ley. El ente provincial no tiene un problema de endeudamiento y, según fuentes de la diputación, es más acuciante invertir los remanentes en los municipios que en los bancos. Las administraciones pueden endeudarse hasta el 75 % de sus ingresos y la diputación ronda el 50 %. Muy al contrario que la Generalitat.

Los alcaldes de todos los municipios de la provincia recibieron ayer la carta en que Jorge Rodríguez y la vicepresidenta Maria Josep Amigó les dan a conocer el plan que pondrán en marcha en septiembre. Los plazos son cortos ya que en tres meses tendrán que estar los proyectos claros y casi, con total seguridad, iniciada la licitación. De esta manera, en el mes de agosto los consistorios tendrán que decidir cuáles son sus prioridades y si casan con el plan de la diputación.

Una política totalmente opuesta a la que fomentó Alfonso Rus, cuyas inversiones en sostenibilidad iban destinas a la introducción de la tecnología LED en las bombillas o la construcción de campos de fútbol de césped artificial. Aquí eligen los ayuntamientos donde invertir.

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