El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha delegado su puesto en el Comité de las Regiones de la Unión Europea en la consellera de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, Elena Cebrián. Cebrián deberá asistir a Bruselas a las seis reuniones anuales de este órgano consultivo al que deben rendir cuentas la Comisión Europea, el Consejo de la UE y el Parlamento Europeo al elaborar legislación sobre asuntos relacionados con la administración local y regional, como la sanidad, la educación, el empleo, la política social, la cohesión económica y social, el transporte, la energía y el cambio climático, según la web de la institución.

El presidente delega en la consellera, lo que no significa que el jefe del Consell no pueda acudir a una de las sesiones del Comité de las Regiones cuando lo estime oportuno. Aun así consideran desde Presidencia de la Generalitat que la persona más adecuada para acudir a esta institución en representación de la Comunitat Valenciana es Cebrián, ya que la mayoría de competencias que se abordan dependen de la consellera de Agricultura, Medio Ambiente y Cambio Climático.

El Comité de las Regiones es un órgano consultivo que ha sido utilizado por muchos líderes regionales de toda Europa para su promoción personal pese a saber la poca influencia real en las decisiones. Esta institución sirve para el debate de los problemas y como escaparate político. Francisco Camps lo utilizó para trasladar la imagen de que tenía peso en la Unión Europea. En el Parlamento Europeo se bromea que los líderes que acuden a estas reuniones colapsan la entrada al hemiciclo con su cámaras y equipos de televisión.

Ingeniera agrónoma

Elena Cebrián, una independiente elegida por Verds Equo (Compromís) para el cargo, es una de las consellers mejor valorados dentro del Consell. Desde Presidencia aseguran que es una persona que conoce con profundidad el área que administra ya que es ingeniera agrónoma, formada en la Universidad Politécnica de Valencia, y funcionaria del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, en Madrid, donde desarrolló su carrera profesional desde el año 2000.

Por su parte, la vicepresidenta Mònica Oltra está encantada por su «capacidad de trabajo y conocimiento del área», según explicó a este periódico. Pese a que no tiene una gran proyección política, no es de aparecer mucho en los medios de comunicación, Oltra está convencida de que los frutos de su gestión no tardarán en conocerse.