El ministerio de Fomento ha iniciado el derribo del puente de acceso al aeropuerto de Manises, que posibilitará el paso de un tercer carril en la A-3 en este punto, uno de los más conflictivos en el acceso a Valencia.
En la demolición del puente se están utilizando excavadoras y martillos neumáticos ante la imposibilidad de realizar voladuras que podrían dañar las instalaciones anexas, el nuevo acceso construido en paralelo al actual o el pavimento de la A-3.
Además, los trabajos se realizan en horario nocturno para reducir las afecciones al tráfico lo que provoca que avancen muy lentamente.
El derribo de este puente es el penúltimo escollo para acabar las obras de ampliación a un tercer carril en la autovía A-3 entre Valencia y Buñol, que acabarán con un coste próximo a los 100 millones de euros y que debería haber finalizado en junio, según declaró la ministra Ana Pastor en marzo tras visitar las obras poco antes de las elecciones.
Sin embargo, la ampliación del tercer carril sigue sin estar resuelta justo en su incorporación a Valencia.
Los trabajos para la mejora del acceso de Xirivella a la A-3, en los términos municipales de Xirivella y Mislata, iniciadas en febrero, han estado paralizadas por problemas técnicos surgidos en el proyecto, por lo que no hay fecha oficial para la finalización de la obra
El proyecto incluye la ampliación del Viaducto del Túria por su calzada derecha sobre la V-30 con una estructura de tres vanos de longitud total de 53 metros, se ampliará la estructura con un ancho que permita el paso de los dos carriles independientes que se sumarán a los tres que aporta la A-3.
