En 2015 se han cumplido 25 años de la existencia del Hospital a Domicilio (HAD) en la Comunitat Valenciana. Se trata de un servicio sanitario que empezó con 4 unidades en todo el territorio valenciano, y que actualmente cuenta con 26 puntos, lo que convierte a la C. Valenciana en la autonomía que más ha apostado por esta modalidad asistencial, por delante de Galicia, La Rioja y País Vasco.
Según datos de la Conselleria de Sanitat Universal i Salut Pública, las unidades de hospitalización a domicilio (UHD) valencianas tiene una capacidad de 1.500 camas virtuales al día, y en 2014 dieron 44.019 altas, lo que supone „si lo comparamos con los hospitales físicos„, una capacidad mayor que el Hospital Universitari i Politècnic La Fe de Valencia, que cuenta con 961 camas y registró 44.019 altas el año pasado. Así pues, el HAD es el centro hospitalario valenciano con más capacidad.
Las primeras unidades de Hospitalización a Domicilio en la C. Valenciana se implantaron en 1990, nueve años después de que empezara a ofrecerse este servicio en Madrid. En ese año se crearon las cuatro núcleos pioneros, que estuvieron ubicadas en Elx , Dénia, Alicante y Valencia (La Fe). Hoy, 25 años después, la sanidad valenciana cuenta con 26 puntos repartidos por todo el territorio, y una unidad de reciente creación, en Llíria. En estas 26 UHD trabajan 380 profesionales, entre médicos y enfermeros, que dan cobertura al 97,8% de la población valenciana. Estos datos convierten a la región en la que más ha apostado por esta modalidad asistencial en España, según la Direcció General d´Assistència Sanitària.
Hoy, cada día se atienden 600 pacientes paliativos. De hecho, en 2014 el 59% de todos los pacientes que requerían estos cuidados fueron atendidos en una UHD, lo que supone un total de 11.096 pacientes, de los cuales 72 eran menores de edad.
El HAD añade una atención sanitaria de calidad a los efectos terapéuticos del domicilio, ya que el paciente y sus familiares se encuentran en su entorno habitual. Por tanto, el domicilio es en muchos casos el mejor lugar terapéutico, donde los objetivos asistenciales se van a conseguir en el menor tiempo posible, con menor número de complicaciones (derivadas de un ingreso hospitalario común, como pueden ser infecciones hospitalarias multirresistentes, desorientación, desnutrición...) y al menor coste social, según los médicos.
Pero también el sistema sanitario obtiene grandes beneficios al desarrollar el HAD: se evita la saturación hospitalaria, se ahorran costes de dinero público, ya que una estancia en una unidad de hospitalización a domicilio cuesta un tercio de lo que cuesta un ingreso convencional, y se ahorran inversiones, porque si la HAD no existiera, la C. Valenciana tendría que haber construido otro hospital como La Fe, o algunos centros estarían aún más saturados.
Con todo esto, las personas que cuidan a sus enfermos en casa, además de ahorrarse idas y venidas a un hospital, cuentan con la tranquilidad de saber que, periódicamente, el médico y su equipo llaman a la puerta de casa.
