La consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, Mª José Salvador, ratificó ayer la revocación de la licencia de obras en la bocana del Portet de l'Olla de Altea que afectaban a la Cala del Soio.

Según declaró la consellera ayer en Altea, proteger la cala «era una reivindicación» vecinal apoyada por el nuevo equipo de gobierno municipal que ha hecho suya también la conselleria que dirige María José Salvador.

«En la Comunitat Valenciana tenemos entornos magníficos y después del urbanismo depredador que hemos sufrido en tantos municipios, viene una nueva etapa de calma, de protección donde la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio estará en primera línea», manifestó.

Por su parte, el alcalde de Altea, Jaume Llinares, resaltó su satisfacción y la de sus convecinos, por la protección de la Cala del Soio. En la reunión se abordó también las posibles figuras de protección, la recuperación del entorno, la mejora del frente litoral y la posibilidad de las licencias de los clubes náuticos, entre otros temas.

El «Portet de l'Olla» es un embarcadero que se construyó a finales de los años 50 del pasado siglo. En su interior amarran actualmente hasta 37 embarcaciones con esloras de 6 metros como máximo.

En los años 90 lo rescató la Generalitat Valenciana, y desde 2006 la concesión del puerto la tiene la empresa Vincelen. El puerto ha sido motivo de polémica desde que se construyó hace ya más de 50 años, pues se erigió sobre el yacimiento arqueológico submarino que se encuentra en la zona de la Cala del Soio.