La decisión de la Conselleria de Educación de modificar, ayer, las condiciones del servicio de transporte escolar para el próximo curso supone un auténtico triunfo, tres años después, para el grupo de madres de Montserrat que en 2012 se rebeló contra una norma impuesta por el Consell del PP que obligaba a medir en línea recta la distancia de tres kilómetros al centro escolar para optar a las ayudas.
El colectivo de madres «No em deixes a peu» de Montserrat protagonizó la protesta más sonada. Su plataforma, apenas veinte madres que representaban a 83 alumnos, ganó fama mundial posando para un calendari erótico con el que recaudar fondos para el autobús.
Aquellas madres fueron protagonistas durante meses con su calendario erótico, del que vendieron 3.200 ejemplares, que llenó portadas y programas de televisión, y que, junto a su participación en el programa Atrapa un millón, generaron suficientes recursos para poder pagar el autobús (18.600 euros) sin las ayudas del Consell. Se convirtieron en azote del PP y amplificaron su protesta en actos contra dirigentes del Consell.
Con razón
La Justicia ya les había dado la razón en dos ocasiones por «falta de motivación» del acuerdo que limitaba las ayudas a quines vivieran a menos de tres kilómetros en linea recta y ayer la Generalitat reparaba finalmente «una injusticia», según la portavoz de las madres, Silvia Lucas. «Aquella decisión se cebaba con los escolares, iba donde hacía más daño a por la gente trabajadora que no se puede defender, porque había que recortar por cualquier lado ; a nosotras siempre nos ha dado vergüenza que lo pagaran los niños y por eso luchamos para que se reparara porque sabíamos desde el primer día que teníamos razón», explicó Lucas.
Lucas agradeció la labor de Compromís, porque «fueron ellos los que presentaron una demanda contra el concepto línea recta». El recurso contra la orden llevaba la firma de la actual vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra.«Estamos muy contentos porque ya cuando el TSJ decidió que tenía que eliminarse el concepto línea recta para nosotros fue un triunfo y ahora mucho más, porque es lo que debe ser». La portavoz aseguró que nunca pidieron «nada del otro mundo». «Sólo un autobús para los niños porque hay mucha gente que vive en zonas de difícil acceso, como nosotros a más de seis kilómetros de Montserrat y hay mucha gente que tres kilómetros en línea recta se convierten en seis para venir al colegio», señaló.
