El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, afirmó ayer en referencia a la reapertura de Canal 9 que el Partido Popular «ha hecho mucho daño» y se ha asegurado «de poner todas las minas posibles para que no se pueda abrir». Para Puig, la Comunitat Valenciana necesita una televisión pública, de calidad en valenciano y plural, «o lo que es lo mismo, una cadena que no tenga nada que ver con la antigua Canal 9».
Tras reunirse con el primer secretario del Partido Socialista de Cataluña (PSC), Miquel Iceta, para reforzar las relaciones entre ambas comunidades, Puig reconoció que están «atendiendo a la legalidad» para reabrir RTVV, y que en ese marco quieren que se pueda hacer «lo más pronto posible».
De momento y como ha venido contando este periódico, PSPV, Compromís y Podemos tienen la intención de empezar a emitir la señal del canal de las Corts (Canal GVA) y contenido enlatado de la extinta RTVV el 9 d'Octubre hasta que a través de una ley se constituya la empresa que ponga en marcha la nueva televisión. La intención de la empresa es llegar a un acuerdo con los extrabajadores y en caso de que no se consiguiera la reapertura se podría posponer a 2017.
El presidente de la Generalitat aseveró que la nueva RTVV tendrá que tener «respeto por los trabajadores que han sufrido el desprecio y una conducta hostil» del anterior gobierno valenciano.
Respecto a la reunión con Iceta, el presidente de la Generalitat defendió que apuesta por un modelo federal de España «sin confrontaciones» en el que esté integrada Cataluña frente a «las fronteras» que «quieren poner el PP y los independentistas» y para dar por cerrada la polémica tras las declaraciones del conseller de Justicia, Germà Gordó, sobre los Països Catalans.
El PP no ve creíble a Puig
El secretario general del grupo parlamentario popular, Luis Santamaría, afirmó que la postura de Puig «ante los ataques secesionistas no es creíble si mantiene a un conseller favorable al proceso independentista como Marzà». Santamaría instó al presidente de la Generalitat a que «además de buenas palabras y de decir que no comparte las teorías de los Països Catalans, actúe». «Hasta ahora que sepamos no ha enviado a Mas ninguna carta para que desautorice a su conseller de Justicia», apuntó.
El diputado popular afirmó que a Puig «le falta firmeza para tomar decisiones. Pone buena cara ante Mas, esboza una sonrisa con Iceta, da una palmada en la espalda a su conseller de Educación».
