El alcalde de Valencia, Joan Ribó, baraja la posibilidad de ser el portador de la Senyera en la procesión cívica del próximo 9 d´Octubre. Se trata de un hecho insólito ya que su antecesora, Rita Barberá, nunca lo hizo, y no se recuerda en la historia reciente ningún alcalde que lo haya hecho. El protocolo de esta procesión, que conmemora la entrada del rey Jaume I en Valencia en 1238, establece que el alcalde preside la procesión y desfila junto con las máximas autoridades detrás de la bandera. El alcalde tiene la competencia exclusiva para nombrar al portaestandarte oficial, una distinción que Barberá ofreció a los concejales de las distintas formaciones políticas.
La posibilidad de que Ribó sea el portador de la Senyera „de momento solo un deseo que el alcalde habría comentado en algunos círculos„ obligaría a hacer cambios en el citado protocolo ya que el alcalde tendría que nombrarse portador a sí mismo. El nuevo alcalde y líder de Compromís se desquitará por no haber podido llevar la Senyera durante los años de gobierno del PP cuando el protocolo imponía la entrada de la bandera en la Catedral para el «Te deum», una tradición instaurada por el gobierno de Rita Barberá, y que Ribó consideró siempre una «imposición». Joan Ribó rechazó en la anterior legislatura los ofrecimientos de Rita Barberá para que fuera portaestandarte precisamente por este motivo. También se negó EU.
Separar lo religioso de lo civil
Para Ribó, la procesión del 9 d´Octubre es una procesión cívica y en la misma deben separarse el ámbito civil del religioso. Precisamente una de las primeras medidas anunciadas por Ribó cuando accedió a la alcaldía fue eliminar la entrada de la bandera en la catedral para el «Te Deum». El Arzobispado, por su parte, ya ha anunciado que mantendrá este acto aunque la bandera oficial no haga escala en la Seo.
