La Comunitat Valenciana está preparada para acoger, hoy mismo, a 300 refugiados. Así lo aseguró ayer la vicepresidenta del Consell, Mònica Oltra, tras afirmar que existe una dotación de 620.214 euros para atender la llegada de los exiliados. Esta sería la ayuda inmediata que el Consell podría ofrecer ahora, pero la maquinaria sigue en marcha para sumar y coordinar apoyos, iniciativas y recursos, mientras la Unión Europea y el Gobierno español deciden qué número de refugiados vendrán a España. Mientras tanto, la Comunitat Valenciana se proclama «acogedora», pide que en esa «guerra de cifras» no se «negocie a la baja» y prepara los recursos necesarios para estar a la altura. «En España hay alrededor de 8.500 municipios. Solo con que cada municipio acogiera a una familia, podríamos recibir a más de 20.000 refugiados en España», explicó Mònica Oltra lo que supondría, según estos cálculos, la llegada de 2.000 refugiados a la Comunitat Valenciana.

Y es que desde que se publicara la imagen de un agente turco recuperando del mar el cadáver de un niño de 2 años, la sociedad valenciana ha mostrado su solidaridad ofertando ayuda de todo tipo, mientras las Administraciones hacen visible las numerosas medidas que están poniendo en marcha.

De estrada existen 300 plazas disponibles en albergues juveniles de Alborache, Benicàssim, Piles, La Florida (en Alicante), Benicarló, Jaume I (en Castelló) y Chera. Se trata de espacios con habitaciones individuales que incluyen baño, servicio de comedor y zonas comunes. El Consell ha descartado, en principio, emplear los pisos de la Generalitat «porque se encuentran en un estado lamentable», apuntó Oltra. Este también ha sido el motivo por el que se ha descartado que el antiguo hospital la Fe se pudiera habilitar como un espacio para los refugiados. «Existen deficiencias estructurales que impiden el uso de este edificio», añadió la vicepresidenta. Por ello, el trabajo se centra ahora en estudiar distintos emplazamientos públicos (y privados) que puedan acoger a las familias desplazadas que huyen a la fuerza de países como Siria, Eritrea o Afganistán.

Entre los espacios que baraja el Consell se encuentran colegios mayores „como el de La Coma o el Luis Vives„ e instalaciones del Consell de la Joventut y de grupos Scouts, entre otros. Es más, se baraja, incluso, que Cruz Roja medie con las entidades bancarias para ver «si se puede disponer de pisos vacíos que tengan en propiedad». «Estamos analizando los recursos que están disponibles, tanto públicos como privados», explicó la vicepresidenta del Consell tras reconocer y agradecer, «la multitud de llamadas de personas que quieren ser familia acogedora. Es increíble la respuesta que estamos teniendo por parte de la ciudadanía. Esa también es una seña de identidad de los valencianos».

Por ello, entre los objetivos más inmediatos se encuentra la creación de un registro de familias acogedoras, así como reuniones con diversas entidades públicas y privadas «para ampliar la cifra de plazas preparadas para la llegada de refugiados».