Setenta y un municipios de la Comunitat Valenciana (14 de Valencia, 29 de Castelló y 28 de Alicante) donde se han detectado focos de la presencia del mosquito tigre han iniciado una lucha sin cuartel para vigilar, controlar y, en la medida de lo posible, erradicar esta especie de culícido que puede trasmitir enfermedades como el dengue y el chikunguña.

La reunión que recientemente ha mantenido el Grupo de Trabajo de Vectores, convocada por la Conselleria de Sanitat Universal, para reforzar los estudios epidemiológicos, implementar la formación de los técnicos y mantener informada a la población es solo una parte de la estrategia que se ha activado para acotar la presencia de este insecto, cuyas picaduras son terriblemente dolorosas.

Los dieciséis centros de salud pública distribuidos por el mapa valenciano van a dirigir los tratamientos que se van a llevar a cabo contra esta especie y que pondrán en marcha y supervisarán inspectores de Sanidad Ambiental.

La conselleria, por su parte, ha informado de que una de las actuaciones en la lucha contra el chikunguña es la reciente aprobación de un protocolo específico para mantener la alerta sobre la aparición de algún caso, como el de Gandia, que finalmente resultó ser un falso positivo.

Vigilar el entorno del enfermo

La actuación consiste en mantener una vigilancia ambiental en el entorno del enfermo que desarrollan entomólogos de la cátedra del control de plagas de la Universitat de València.

Ese trabajo comienza con la realización de encuestas por parte de los epidemiólogos para establecer el territorio en el que se ha movido el enfermo y trasladar los datos a Sanidad Ambiental, tanto si se trata de un caso de chikunguña importado „en estos momentos hay 19„ como autóctono y conocer si en su etapa viral (el momento de la trasmisión de la enfermedad), que es cuando el paciente tiene fiebre este se encuentra en la C. Valenciana.

Con estos datos, los entomólogos buscan al mosquito tigre en las zonas donde hay agua (imbornales) para detectar las larvas. Cuando finalmente lo localizan se da caza al ejemplar y a sus larvas y se trasladan a un laboratorio especializado que confirma si el mosquito es portador del virus que ocasiona la enfermedad. Durante la actuación se informa al ayuntamiento del territorio donde se ha localizado el insecto y a la empresa que va a realizar el tratamiento.

Para erradicarlo se utiliza un larvicida cada 7-10 días que destruye las larvas en todos los imbornales o zonas de agua estancada en un área de 200 metros alrededor de donde se ha determinado el caso afectado.