El síndic del PSPV en las Corts, Manolo Mata, asegura que el pacto del Botànic «goza de muy, muy buena salud», a pesar de las «disfunciones» que ha habido y «seguirá habiendo». En una entrevista, el portavoz socialista admite que la cercanía de las elecciones generales «es un campo minado» para ese pacto, pero asevera: «Hay que sortearlas y las sortearemos todos», porque «aquí se sacrifica todo por la voluntad de cambio» que había en la Comunitat Valenciana.
«La gente quería un cambio, y el único cambio posible era este y se ha articulado», sostiene Mata, quien añade: «Todas nuestras pequeñas miserias y mezquindades quedarán ocultas en aras a insistir en el cambio. Si fracasáramos después de lo que ha pasado en estos veinte años, sería un drama colectivo».
En las generales, el PSPV hará «todo lo posible por seguir siendo la primera fuerza de la izquierda, sin que eso pase necesariamente por atacar a los socios de gobierno». Reconoce que Compromís «está en su derecho» de querer llegar a acuerdos con Podemos y aspirar a ser «la primera fuerza alternativa», y considera que, una vez alcanzada la «velocidad de crucero» en el Consell, hay que «mejorar las relaciones personales» entre los diputados del PSPV, Compromís y Podemos.
Las Corts «ya están en el centro de la vida política, de donde nunca debieron apartarse», asevera el socialista, quien prevé que «al final, el legislativo y el ejecutivo chocarán», si bien el Consell les deja su «espacio» y «nunca se quiere entrometer» en la labor de los grupos, como RTVV. Mata afirma que el «embrollo» que ha dejado el PP en RTVV «es terrible, y no hay soluciones mágicas», por lo que no quieren dar «pasos en falso», y considera que «mucho antes» del próximo verano esté en marcha la nueva RTVV.
