El president de la Generalitat, Ximo Puig, y la vicepresidenta, Mónica Oltra, acusaron ayer a Mariano Rajoy, presidente del Gobierno de España, de «actuar con una profunda deslealtad democrática» con el Consell Valenciano y con los propios valencianos, a los que este representa. Oltra censuró a Rajoy «por estar en Valencia hoy „por ayer„ para asistir a un acto partidista del PP y no haber sido capaz» de buscar unos minutos «para reunirse con el president de la Generalitat, que no sólo representa al Consell sino a todos los valencianos».

La vicepresidenta consideró «una deslealtad institucional incompatible con un Estado Democrático este menosprecio del presidente de España hacia la Comunitat Valenciana».Por su parte, Ximo Puig puso cifras a los agravios que, a su juicio, ha cometido el ejecutivo de Mariano Rajoy con los valencianos. «El Gobierno de España ha dejado de invertir más de 2.000 millones en la Comunitat en los 5 años que lleva gobernando Rajoy». Al mismo tiempo, Puig advirtió que «la gran dificultad» que tiene hoy el nuevo ejecutivo autonómico formado por PSPV y Compromís es «la falta de viabilidad» de sus finanzas y recursos económicos «para destinarlos a hacer políticas sociales, económicas y de inversión».

No en vano, enfatizó que el Conseller de Hacienda ya les ha informado que el año que viene «tendremos que pagar 4.000 millones de euros como mínimo de deuda», una deuda heredada del expresident popular Alberto Fabra, que «sigue creciendo y que ya alcanza los 40.000 millones de euros». Tanto que Hacienda será la segunda conselleria en presupuesto en 2016 por esta carga financiera, explicó.

Puig ratificó que «la hoja de ruta» del nuevo Consell de izquierdas pasa «por el diálogo» con el Gobierno de España para conseguir la financiación que realmente necesita y corresponde a la Comunitat Valenciana pero que si no se produce ese diálogo, «el final será recurrir a los tribunales».

Un 9 d'Octubre «reivindicativo»

Por ello, anunció «un 9 d'Octubre reivindicativo, al que llamo a todos los valencianos, para demandar juntos lo que nos corresponde». Al tiempo que avanzó que «todos los consellers recorrerán el territorio autonómico» en los próximos días para explicar que el Gobierno del PP de Madrid no envía a Valencia los recursos que necesitan los ciudadanos de la Comunitat, e incluso para interpelar a los propios contribuyentes, para que sean ellos quienes reivindiquen más transferencias estatales.

«Reestructuración de la deuda»

Cuestionado de nuevo sobre si de verdad acudirán a los tribunales, Puig enfatizó: «No queremos llegar a ese punto, preferimos el diálogo, pero el Gobierno actúa de manera profundamente desleal con los valencianos». Hasta el punto que dibujó: «Una triple acción „de Moncloa„ contra la Comunitat Valenciana: el sistema de financiación injusto, la pasividad en la reestructuración de la deuda y la falta de inversiones, acumulada en perjuicio de la Comunitat presupuesto tras presupuesto».

En esa línea, la vicepresidenta del Consell aseguró que se está reivindicando «un modelo constitucional de financiación» frente a «un modelo que hipoteca a comunidades como la nuestra», ya que esto supone «no poder garantizar los derechos constitucionales» de los ciudadanos. Oltra ha querido destacar que la demanda del Consell es necesaria para crear «un sistema inclusivo» de financiación.