La ley de Señas de Identidad, una norma impuesta por el PP a finales de la anterior legislatura y que comporta la creación de un Observatorio con poder para vetar la concesión de subvenciones a entidades que no asuman la "individualidad" del valenciano, tiene los días contados.

El portavoz socialista, Manuel Mata, junto con los responsables de Compromís, Fran Ferri, y de Podemos, Antonio Montiel, han registrado una proposición de ley que para materializar la derogación de la ley de Señas de Identidad, una norma contra la que la entonces oposición se levantó por considerar que "dividía" a los valencianos.

La ley reconoce como señas de identidad valencianas los símbolos, la lengua valenciana, el Siglo de oro, el Archivo de la Corona de Aragón, Els Furs, las bandas de música, el cant d'estil, la pilota, la colombicultura, las fiestas tradicionales, la gastronomía o las manifestaciones religiosas arraigadas en la tradición, entre otras.

Pero el punto más polémico es la creación del Observatorio de las señas de identidad, donde están la Real Academia de Cultura Valenciana o Lo Rat Penat pero no la oficial Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL) ni el Consell Valencià de Cultura, que hará propuestas y participará en la revisión de las subvenciones públicas que "atenten" contra las señas de identidad.

De hecho, la ley de Señas fue la respuesta del PP a la actitud de los académicos de la AVL (en su mayoría designados en su día por los populares) de no acatar las directrices de Presidencia y mantener la tesis de que el valenciano es una lengua "compartida" con Cataluña o Baleares.

Capacidad docente para la RACV y Lo Rat

La ley que se va a derogar reconoce, asimismo, la capacidad docente de la Real Academia de Cultura Valenciana y de Lo Rat Penat en la divulgación de las señas y la lengua valenciana, y se establece que esta última es institución consultiva de la Generalitat en materia de patrimonio cultural.

La propuesta legislativa del tripartito justifica la derogación por entender que la diversidad cultural valenciana choca con el "numerus clausus" impuesto a las señas de identidad en la normal, al tiempo que se censura el uso de la señas valencianas "como elemento de confrontación social y política".

La norma, por otra parte, declara patrimonio cultural valenciano, como bien de interés cultural inmaterial, los 'bous al carrer' y establece que mediante decreto del Consell se establecerán las medidas específicas de protección y fomento de estos festejos.

Una ley "innecesaria"

Tras presentar la iniciativa en el registro de las Corts, los portavoces