La Sociedad Española de Cardiología (SEC) ha destacado la desigualdad que existe entre las autonomías en la atención al paciente cardiológico crítico, lo que ocasiona graves diferencias en las tasas de mortalidad, que en la Comunitat Valenciana está el 8 %, por encima de la media nacional.

El presidente de la SEC, José Ramón González-Juanatey,ofreció ayer datos sobre la mortalidad intrahospitalaria en España por infarto, que arroja un resultado medio del 7,30 %, y de las comunidades autónomas, que presentan diferencias entre ellas, con los casos extremos de La Rioja, con la más alta mortalidad (8,60 %) y Cataluña, con la más baja (5,90 %).

Extremadura también se acerca al 8,5 por ciento y entre el 7 y el 8 por ciento se encuentran Andalucía, Aragón, Asturias, Canarias, Castilla y León, Valencia, Murcia, País Vasco y Galicia.

Para corregir esta falta de equidad, que se debe al modelo de atención, la SEC ha elaborado un documento, denominado Incardio, en el que se incluye la necesidad de contar con Unidades de Críticos Cardiológicos bajo responsabilidad directa de cardiólogos en hospitales con un área mayor de 300.000 habitantes, que deberían contar con presencia de cardiólogos las 24 horas durante los 365 días del año.