El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha tenido, en su segunda visita a la Comunitat Valenciana este mes, palabras de elogio para la presidenta del PP valenciano, Isabel Bonig (que ha intervenido en el acto), y el expresidente Alberto Fabra, presente también y al que el jefe del Gobierno ha reconocido que le tocó "bailar con la más fea".

En su intervención en el acto del PP celebrado en la localidad alicantina de Finestrat a dos días de que convoque las elecciones generales del 20 de diciembre, ha recordado que el PP sigue siendo la primera fuerza política en España y en la Comunidad Valenciana como han demostrado las últimas convocatorias electorales que se han celebrado.

"Luego han venido los pactos, acuerdos y chapuzas, pero el PP va a trabajar con intensidad para transmitir que lo que necesitamos a partir del 20 de diciembre es que siga el cambio producido en la economía. Esa es la clave", ha sentenciado.

Tras referirse al pacto de Gobierno de izquierdas en la Comunidad Valenciana ha señalado que los ejecutivos no deben generar problemas ni crear dificultades y ha deseado que los que han asumido esa responsabilidad en esta comunidad "sin haber ganado las elecciones", al menos no generen problemas.

En sus alusiones a cuestiones que preocupan a la Comunidad Valenciana se ha referido a la del agua para recordar que algunas cosas se han hecho estos años para solucionarlo, avanzar que hará otras antes de que acabe la legislatura y, en la próxima, espera que se alcance una solución definitiva al que ha dicho que es uno de los problemas más complejos que tiene España.

Isabel Bonig ha elogiado la gestión de Rajoy, ha acusado al presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, de "no parar de llorar y lamentarse" y ha afirmado que ocupa ese cargo para actuar, por lo que, si "no sabe o no puede, que se marche".

Rajoy, quien llegó ayer tarde a Alicante, ha aprovechado la mañana para dar una larga caminata por el paseo marítimo de la capital y ha visitado en Finestrat a la Asociación de Mujeres de esta localidad, con las que ha colaborado en la preparación de una paella.

Desde esta localidad, el presidente se ha desplazado a Calp para dar un paseo por su centro histórico y visitar la Asociación de Moros y Cristianos.