El Partido Popular se ha quedado solo en la votación de una propuesta conjunta del resto de grupos parlamentarios, surgida a partir de una iniciativa de Ciudadanos, que reclama la reversión a rústico de suelo declarado urbanizable en la etapa del "boom" del ladrillo, pero que con el estallido de la burbuja inmobiliaria se quedó sin edificar. La propuesta insta al Consell a "definir y habilitar" un procedimiento que, garantizando la autonomía local, haga posible revertir planes urbanísticos por la "alteración manifiesta de las circunstancias socioeconómicas y sin incurrir en responsabilidades patrimoniales graves".

En la última sesión de control en las Corts y a pregunta de la portavoz de Ciudadanos, Carolina Punset, el presidente Ximo Puig anunció que la Generalitat va a impulsar que se reclasifiquen a rústico un total de 52.000 hectáreas incluidas en PAI no desarrollados. En esta enmienda consensuada y firmada por el PP solamente para que se tramitara, no se concreta, en cambio, la superficie que será objeto de la reversión de terrenos a su "uso originario o real". Los populares se han abstenido alegando que eran más partidarios de la enmienda del PSPV en la que se solicitaba la desclaficación del suelo que no cumpla los criterios de la estrategia territorial valenciana, en vez de un cambio global de toda la superficie declarada urbanizable pero sin edificar.

La diputada popular Elisa Díaz ha mantenido un duro enfrentamiento con la síndica de Ciudadanos, Carolina Punset. Díaz, quien fue delegada territorial de Urbanismo en Alicante e hija del exalcalde de esa ciudad Luis Díaz Alperi, ha llamado varias veces "ignorante" a la parlamentaria de C's. «Pero qué ignorante es usted, no sabía que fuera tan ignorante», ha insistido la diputada popular. «¿Qué clase de desvergüenza tienen ustedes?», le ha replicado la portavoz de Ciudadanos e impulsora de la reclasificación de suelo. Punset ha acusado a los populares de ser los responsables de «saquear el territorio» de la Comunitat Valenciana y en un momento del rifirrafe dialéctico le ha espetado: «Shame on you» (¡Qué poca vergüenza tenéis!). «Se lo digo en inglés porque no me entiende en castellano», ha advertido Punset.