El debate fiscal en los presupuestos promete ser intenso. El Consell de izquierdas decidió de cara a 2016 subir el Impuesto de Patrimonio para que las rentas más altas aporten más. En concreto, rebajó el mínimo exento (excluida vivienda habitual) de 700.000 a 600.000 euros, al tiempo que regula una tarifa propia que eleva un 25 % la estatal. En total se prevén ingresar 29,1 millones y que 1.832 valencianos pasen a pagar por este tributo. El PP ha presentado enmiendas a la ley de acompañamiento que elimina los artículos para dejar el impuesto como está. En cambio, Ciudadanos, no solo anula la reforma, sino que pide que paguen menos los patrimonios elevados, situando el mínimo exento en un millón de euros. También rebaja 3 centésimas el tipo aplicable. Podemos, por contra, reduce el mínimo exento a 400.000 euros y cambia los tramos, en lo que supondría disparar los importes a abonar.
