La Generalitat trabaja en una serie de medidas dirigidas a flexibilizar el acceso de familias a las viviendas protegidas de promoción pública de la Entidad de Infraestructuras de la Generalitat (EIGE), en toda la Comunitat Valenciana, según informaron ayer fuentes de la Conselleria de Vivienda. Para ello tiene previsto promover ajustes normativos para modificar el régimen de uso de sus viviendas con el objetivo de que, indistintamente, puedan estar a disposición tanto en régimen de venta, alquiler o alquiler con opción a compra, según las necesidades que presente cada caso concreto.

Por ejemplo, va a reducir en un 38% el precio medio de venta de varias de sus viviendas protegidas que dispone en Orihuela, pasando de los 111.534 euros iniciales a un precio actual de tan sólo 69.000 euros.

El objetivo de este cambio normativo que está desarrollando la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio es facilitar el acceso a la vivienda protegida a colectivos que no podían acceder a la compra, dadas las limitaciones económicas. Actualmente existen en la Comunitat Valenciana un total de 1.042 viviendas de VPO de promoción pública en régimen de alquiler y más de la mitad están vacías, y hay 330 viviendas a la venta que no tienen comprador.

De esta manera, por ejemplo, las viviendas protegidas que dispone la Generalitat en venta pueden cambiar el régimen al de alquiler o arrendamiento con opción a compra, con rentas algo más reducidas, siempre y cuando esta opción se adapte mejor a los posibles inquilinos y cumplan los requisitos. Se trata de viviendas de VPO con una superficie máxima de 90 metros cuadrados, todas ellas con garaje y algunas incluyen trastero.