El pleno de las Corts aprobó ayer la Ley de Medidas Fiscales, de Gestión Administrativa y Financiera de la Generalitat —Ley de Acompañamiento a los Presupuestos de la Generalitat para 2016— con los votos a favor de los diputados del PSPV, Compromís y Podemos y en contra de PP y Ciudadanos (C's).
La Ley de Acompañamiento elimina tasas por servicios públicos para familias monoparentales o víctimas de violencia machista, suprime el copago social para mayores y personas dependientes en centros de día y lo reduce para el caso de las residencias. Asimismo, rebaja de 700.000 a 600.000 euros la cuantía del mínimo exento del Impuesto sobre el Patrimonio y crea una tarifa propia sobre este tributo.
Entre las enmiendas que más han centrado el debate de la Ley de Acompañamiento, destacan las referidas al impuesto sobre el Patrimonio. El PP planteaba dejarlo como estaba; Podemos proponía bajar el mínimo exento a 400.000 euros, mientras que C's pedía ampliarlo a un millón de euros, porque, tal y como indicó el diputado de este grupo Antonio Woodward, la rebaja del Consell a 600.0000 euros es «demasiado importante».
El diputado del PP, Rubén Ibáñez, explicó el voto en contra de su grupo parlamentario. Habló de una «oposición manifiesta» a una ley que consideran «un verdadero atropello de derechos» llevado a cabo por el conseller de Hacienda, Vicent Soler.
La socialista Ana Barceló, por su parte, calificó de «indecente que un partido que ha estado saqueando a la Comunitat Valenciana, que tiene a altos cargos en la prisión, que ha designado a dedo durante 20 años venga a darnos lecciones».
Soler agradeció «el gran esfuerzo» de las Corts en la aprobación de esta norma, de la que tuvieron «toda la libertad para enmendar y mejorar» lo que es una muestra de «soberanía popular», destacó. la diputada de Compromís Mireia Mollà subrayó que es la Ley de Acompañamiento «más social que ha conocido en la historia el País Valencià».
Las cuentas de 2016
Ayer, el pleno de las Corts inició el último trámite para la aprobación de los Presupuestos de la Generalitat para 2016. Se debatieron doce enmiendas del PP que no salieron adelante y se aprobaron las cuentas del parlamento, la Sindicatura de Comptes, el Consell Valencià de Cultura y el Consell Jurídic Consultiu.
