El exconseller Rafael Blasco, condenado a seis años y medio de prisión por desviar fondos destinados a la ayuda al desarrollo, ejerció como cronometrador de una velada diurna de boxeo organizada el pasado sábado en el Centro Penitenciario de Picassent donde se encuentra preso. Blasco, gran aficionado a este deporte, fue el encargado de cronometrar cada uno de los tres asaltos de los cinco combates entre internos y boxeadores amateur y de tocar la campana al inicio y finalización de los mismos.

El acto, organizado por la Federación de Boxeo de la Comunitat Valenciana y por los responsables del gimnasio de la prisión, pretendía buscar la reinserción de los presos a través del deporte, según apuntaron las fuentes consultadas. Respecto a la participación del exconseller prefirieron no hacer declaraciones. Asimismo, se trata de la primera vez que se celebra una velada de este tipo en el citado centro penitenciario desde su apertura hace ahora 25 años.

El pabellón deportivo de la prisión, con capacidad para 400 personas, se llenó y los funcionarios tuvieron que dar prioridad a aquellos internos con mejor comportamiento. Así, a las 11.00 horas comenzaron los combates, que contaron con todos los habituales en este tipo de espectáculos deportivos, incluida una perfecta iluminación y sonido.

Asimismo había cuatro jueces de la federación -uno como árbitro y los otros tres puntuando-, una interna como «round girl», aunque «vestida con normalidad», matizaron las fuentes y Rafael Blasco como cronometrador de los tres minutos de cada asalto y como encargado de la campana que anuncia el inicio y el final de cada uno de ellos.