«Nos parece muy lamentable». Jesús Figuerola, presidente de la Associació d'Editors del País Valencià (AEPV) y de la Fundació pel Llibre i la Lectura (FULL) afirmó ayer a Levante-EMV hablar «en nombre de todo el sector del libro».

«Esto es un reflejo de lo que ha pasado en los últimos años y un malgasto de presupuesto público», puntualizó, y añadió que «hacer publicaciones sin estudiar la repercusión indica algo».

Además, Figuerola también se mostró muy molesto, ya que la publicación de los libros coincide «con la época de los recortes a las ayudas al sector del libro», pero la Generalitat editaba publicaciones «de alto coste», apuntó el editor.

«No había dinero para el sector del libro, pero sí para productos lujosos y muchas veces inútiles», sentenció.

«Esto es solo la punta del iceberg de una política hacia el sector del libro disparatada» que Figuerola cree que tiene un alto coste para los valencianos. Se muestra convencido de que los precios que pagó la administración eran más elevados de lo necesario, porque las imprentas marcaban el precio que querían.

El presidente de AEPV y FULL recordó las dificultades de los últimos años, en los que algunas ayudas, como a la traducción de libros, desaparecieron o se redujeron al mínimo. Un sector que se encontró desprotegido en los años de crisis, como cuenta.

Ahora, bibliotecarios y libreros piden representación en la comisión técnica de publicaciones.