El Gobierno valenciano destinará 5,9 millones de euros a su plan contra la pobreza energética para que nadie tenga problemas «para calentar su vivienda este invierno», según dijo ayer el president de la Generalitat, Ximo Puig.

En la rueda de prensa que ofreció para valorar el inicio de este plan, Puig matizó que la iniciativa tendrá una primera etapa que contará con 4 millones de euros, y que beneficiará a unas 15.000 familias, y ha destacado que esta es la primera orden que publica en 2016 el Diari Oficial de la Comunitat.

Puig explicó además que el plan contra la pobreza energética tiene una segunda vertiente que atenderá a todas aquellas personas que han sido desahuciadas para que no se produzca el desamparo «terrible» que significa «no tener un hogar digno». «El objetivo es que de verdad nadie en la Comunitat Valenciana pase frío y tenga el apoyo del gobierno de la Generalitat para que su vida cotidiana esté de la mejor manera posible», añadió el presidente.

La consellera de Vivienda, María José Salvador, también presente en la comparecencia, detalló que de los primeros cuatro millones de euros se destinarán 2,5 para casos de pobreza energética y 1,5 millones para las ayudas de alquiler a personas que se encuentren "en situación de vulnerabilidad. Salvador anunció que esta partida inicial se irá ampliando progresivamente conforme haya una demanda, y ha revelado que, según las estimaciones de la Generalitat, serán 12.000 familias las que se podrán acoger a la orden de pobreza energética y entre 2.000 y 2.500 las que podrán acogerse a las ayudas de alquiler".

«Un plan sin precedentes»

La consellera Salvador destacó la «sensibilidad» del Consell porque el plan «no tiene precedentes en el gobierno valenciano», y añadió que las ayudas se tramitarán a través de los servicios sociales municipales porque es la administración local «la que detecta las necesidades y las situaciones de emergencia de sus vecinos».

Por ello, insistió en que es «muy importante» que los ayuntamientos se adhieran ya que de lo contrario «los ciudadanos de los municipios no podrán acogerse a las ayudas» y les ha instado también a adscribirse a los acuerdos que la Generalitat firmó con las empresas suministradoras para que no haya cortes de agua, luz o gas. Puig hizo «un llamamiento a los ayuntamientos» para que se apruebe la adscripción a este programa con la mayor rapidez posible, y confirmó que la adhesión a estas ayudas será a través de los ayuntamientos por lo que agradeció a la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (Fvmp) su labor «para llegar a todas las localidades de la Comunitat».

Salvador precisó que la solicitud se realiza por vía telemática, aunque debe pasar primero por junta de gobierno y plenos municipales, por lo que debido al periodo vacacional solo 30 localidades han empezado el proceso de adhesión. La consellera añade que todos los días llegan peticiones y que el teléfono 012 realiza un servicio de atención personalizado.