La consellera de Sanidad Universal y Salud Pública, Carmen Montón, se ha dirigido por carta al ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, para solicitarle la convocatoria urgente del pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud y abordar las consecuencias que se derivan de la publicación del Real Decreto 954/2015, de 23 de diciembre, por el que se regula la indicación, uso y autorización de medicamentos y productos sanitarios por parte de los profesionales de enfermería.

Un decreto por el que los enfermeros no podrán usar ni indicar ningún medicamento sujeto a prescripción médica si antes no tienen la prescripción del facultativo. Su entrada en vigor afecta directamente a las enfermeras cuando administran una vacuna, sin una pauta previa del médico; cuando utilizan cremas para curar heridas, quemaduras o úlceras por presión, o cuando realizan el seguimiento de los pacientes crónicos en las consultas, por ejemplo, en el caso de los diabéticos.

Para la consellera Montón, el decreto altera las competencias del colectivo de la enfermería y contraviene lo establecido en la Ley de Garantías y Uso Racional de Medicamentos y Productos Sanitarios.

La consellera entiende que el citado decreto «puede poner en peligro la adecuada atención al paciente, aumentar las cargas burocráticas, además de no tener en cuenta la alta cualificación profesional de la enfermería en nuestro país».