Cuatro días en 2006 frente a los seis meses (con 19 días días de comparecencias, como mínimo) previstos para 2016. Treinta y dos comparecientes, impuestos por la mayoría del Partido Popular en 2006, frente a los 70 testigos consensuados por cuatro grupos parlamentarios, diez años después.

Son las macrocifras que definen, en un simple vistazo, las diferencias abismales que separan la comisión de investigación del accidente del metro que se hizo entre julio y agosto de 2006, apenas unas semanas después del siniestro y con las familias de las víctimas aún noqueadas por el dolor, de la nueva cita parlamentaria que comienza hoy.

Es el principio del final «digno» que cuatro de los cinco grupos parlamentarios pactaron con la Asociación de víctimas del metro 3 de julio (Avm3j) el pasado 4 de mayo. Un acuerdo que logró recabar el apoyo de seis formaciones políticas (PSPV, Compromís, Ciudadanos, Podemos, EU y UPyD) y de la que el PP se autoexcluyó, tras recibir la invitación de la Avm3j, en una carta de la presidenta popular, Isabel Bonig, en la que derivaba a la investigación judicial la asunción de responsabilidades y en la que justificaba la gestión que el PP hizo del accidente. De hecho, los populares han mantenido durante los últimos nueve años una defensa numantina de la monocausa con la que ellos explican el siniestro (la velocidad), y del tratamiento que dieron a las familias de las víctimas del metro a las que Francisco Camps aseguraba que «llevaremos siempre en nuestro corazón».

Depurar responsabilidades

La comisión de investigación del accidente del metro que arranca hoy se convoca para «depurar responsabilidades profesionales, técnicas, de gestión y políticas». Debe estar finalizada antes del primer año de legislatura y analizará la seguridad en Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) antes y después del accidente, además de poner la lupa sobre la gestión y el tratamiento que sobre el siniestro del 3 de julio se hizo en la Ràdio Televisió Valenciana (RTVV) y la Sindicatura de Greuges.

Setenta comparecientes deberán aclarar públicamente ante sus señorías, por primera vez, el por qué de muchas de las decisiones que se tomaron tras el siniestro. El listado de comparecientes incluye a altos cargos del Consell (Francisco Camps, Juan Cotino, Víctor Campos o Vicente Dómine), FGV (la ex gerente, Marisa Gracia, los directivos adoctrinados y sindicalistas) y RTVV (Pedro García, Lluis Motes y Lola Johnson). Hoy ofrecerán sus testimonios los cuatro portavoces de la comisión en 2006: Francisco Tomás Puchol, Joan Antoni Oltra, Andrés Perelló y Serafín Castellano).

En unos meses también comparecerán las víctimas del metro, a las que no se escuchó en la anterior convocatoria y que no han dejado de denunciar durante más de nueve años los «0 responsables» del accidente que segó la vida de 43 personas.