El exportavoz del PP en el Ayuntamiento de Valencia Alfonso Novo mantiene su condición de investigado por el caso Imelsa tras comparecer hoy ante el juez y no dejará su acta de concejal al menos hasta que "se levante el secreto del sumario y declare todo el mundo", según ha afirmado.

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Novo había sido citado a declarar hoy ante el juzgado de instrucción número 18 que investiga un supuesto amaño de contratos a cambio de comisiones ilegales y blanqueo de capitales en el marco de la operación del caso Imelsa, en la que se han visto implicados, entre otros, los actuales concejales populares y algunos asesores.

El exportavoz popular ha estado apenas diez minutos ante el juez y se ha acogido a su derecho a no declarar, como ya hizo ante la Guardia Civil la semana pasada.

Ha admitido ante los periodistas que conocía las donaciones de mil euros que se efectuaron al partido durante la última campaña electoral y que él participó "por transferencia bancaria" pero ha negado que se le devolviese ninguna cantidad en efectivo. "No me devolvieron nada; no sé a otros, que yo sepa, no", ha afirmado Novo.

En relación a las declaraciones de los testigos que afirman que vieron algo turbio y por eso se negaron a participar en las donaciones, Novo ha respondido: "ellos sabrán lo que dicen y por qué lo dicen".

"Yo espero, confío y deseo que se levante el secreto de sumario y se conozca con exactitud todo lo que hay en el expediente", ha agregado.

Sobre la situación en la que podría quedar el grupo municipal del PP, ha reconocido que no lo sabe y ha recordado que tuvieron una reunión con la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, "y el tema quedó suficientemente claro; tenemos una investigación en marcha pero no sabemos el contenido exacto".

"Cuando declare todo el mundo, se abra el secreto de sumario y se sepa cual es el contenido real de las acusaciones, se tomarán medidas pertinentes a todos los niveles", ha puntualizado.

Preguntado por si cree que la exalcaldesa Rita Barberá conoce el supuesto blanqueo, ha dicho que no lo sabe y que ella ha realizado un comunicado, que ha visto en la prensa, y que ha leído que "ella aportó una donación".

A su entrada al Juzgado de Instrucción número 18, que instruye la "Operación Taula", que sabía que "se daba dinero al partido" pero que jamás vio "nada sospechoso". No tenía "ni idea" del supuesto blanqueo de capitales que investiga el magistrado.

El exportavoz del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Valencia, que ha dicho estar "tranquilo" y "bien, gracias a Dios", se ha negado a hacer más declaraciones y ha emplazado a los medios de comunicación a su salida.

Salom: "Tengo plena confianza en la Justicia"

El asesor municipal del PP Luis Salom ha declarado durante 25 minutos en el juzgado en calidad de investigado y no se le ha aplicado ninguna medida cautelar, según fuentes jurídicas.

A su salida, Salom ha afirmado: "Tengo plena confianza en la Justicia"

Las preguntas del juez se han centrado sobre la supuesta vinculación de los tres en el llamado "caso Imelsa", la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Valencia, Ciegsa (empresa creada por la Generalitat para la construcción de infraesturas educativas) y la Fundación Jaume II El Just, por realizar adjudicaciones fraudulentas a cambio de comisiones ilegales. "Se investigan contratos desde el año 2003", según han matizado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJ-CV).

En los próximos días, además, será citada como investigada una cuarta persona que, al igual que Novo, figura como autorizada para disponer de las cuentas de la agrupación local del PP.

No obstante, durante la jornada de hoy, además de a los tres investigados arriba mencionados, el juez instructor también tomará declaración "a cinco testigos" cuya identidad aún no ha trascendido, confirman fuentes del TSJ-CV. Cuatro de esos testigos serán interrogados por su presunto conocimiento o vinculación con un supuesto delito de blanqueo de capitales.

De portavoz a militante suspendido

El nombre de Alfonso Novo fue de los primeros en sonar, junto al de la exconcejala Mª José Alcón, hace una semana, cuando la "Operación Taula" aún era sólo el "caso Imelsa".

Entonces, el todavía portavoz del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Valencia y sucesor de Rita Barberá fue reclamado por la Guardia Civil en calidad de investigado (imputado antes de la reforma de la ley) porque era una de las personas con capacidad para manejar las cuentas del partido en la ciudad.

En todo momento, Alfonso Novo mantuvo que no sabía por qué se le investigaba y que jamás había tenido relación con Imelsa, al tiempo que se ofreció a colaborar con la Justicia. El aún portavoz popular también manifestó que no tenía intención de abandonar su cargo al frente del partido, pero horas después de los registros en el Ayuntamiento de Valencia, el Comité de Derechos y Garantías del PP lo suspendió "cautelarmente", al igual que hizo con todos los arrestados e investigados en la trama.

Novo acudió al día siguiente a declarar ante los investigadores de la UCO, que se llevaron documentación y correos electrónicos de las dependencias del grupo municipal popular en el consistorio valenciano. Los agentes le preguntaron acerca del funcionamiento del grupo y sobre donaciones hechas al partido en Valencia en la pasada campaña electoral por si éstas pudieran implicar un presunto delito de blanqueo de capitales.

Poco después, la cúpula del PP de Valencia fue citada por la Guardia Civil y, posteriormente, por el juez instructor.

Un partido en jaque

Desde el viernes, concejales, exregidores y asesores del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Valencia han prestado declaración ante el Instituto Armado por su presunta relación con el blanqueo de capitales y la supuesta financiación ilegal del partido. Tras tomarles declaración, los investigadores les entregaron las citaciones para acudir a declarar ante el juez encargado del caso. Muchos de ellos se negaron a prestar testimonio ante los agentes y anunciaron que sólo lo harían ante el magistrado.

La situación de imputación global sobre la cúpula del PP de Valencia ha llevado a Génova y a la dirección del PPCV a disolver el partido en la ciudad y anunciar una gestora. Pese a todo, ahora, los responsables autonómicos del PP temen por la marca y estudian celebrar un congreso extraordinario para refundar el partido con unas nuevas siglas, al tiempo que se ha empezado a presionar a la exalcaldesa y actual senadora, Rita Barberá, para que dimita. Ella, por su parte, emitió ayer un comunicado en el que niega cualquier vinculación con la "Operación Taula" y exige que se respete la presunción de inocencia.