Los principales modelos meteorológicos comienzan a coincidir en la llegada de un escenario netamente invernal a la Península a partir del próximo lunes, cuando un ligero desplazamiento del anticiclón de las Azores, unido a las borrascas situadas en Centroeuropa e Italia, canalizará durante unas horas vientos de procedencia ártica que harán caer espectacularmente las temperaturas máximas en relación con las de los últimos días.

La duración de este fenómeno y la posibilidad de que se produzcan precipitaciones en forma de nieve está todavía por definir.

Por el momento, el pronóstico de la Agencia Estatal de Meteorología tan solo alcanza hasta el próximo domingo, cuando prevé intervalos nubosos con probabilidad de precipitaciones en el interior. La cota de nieve bajará ese día hasta los 1.400 metros, con temperaturas en descenso «notable» en el interior.

Hasta entonces, las temperaturas no sufrirán apenas variaciones respecto a las de las últimas horas debido, sobre todo, a la persistencia del viento de poniente, que seguirá soplando con intensidad de fuerte a moderada, con algunas rachas fuertes el sábado y también el viernes, cuando está previsto la activación del aviso amarillo por riesgo de vientos en las provincias de Castelló y Valencia.

Ayer, el termómetro marcó una temperatura de 25,5 grados en Torreblanca, que fue la máxima de España, mientras que Castelló (23,5º) y Elx (23,3º) se situaban también entre los 10 registros más elevados en el país.

El viento volvió a soplar con fuerza y en Zarra alcanzó una velocidad de 90 km/hora „ máxima también en España„ , mientras en la Pobla de Benifassà se registraba una racha de 98 km/hora.