Los empresarios valencianos temen que el retraso en la puesta en marcha del corredor mediterráneo ponga en peligro la competitividad exterior de sus proyectos. Así lo pusieron de manifiesto ayer representantes de la industria agroalimentaria y de la automoción en la sesión de trabajo que se celebró en la sede de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) con la participación del secretario autonómico de Vertebración del Territorio, Josep Vicent Boira, del presidente de la funda ProAVE y vicepresidente primero de Ferrmed, Federico Félix y varios empresarios relevantes de la Comunitat con intereses exportadores.
En la reunión, Félix pidió la finalización «inmediata y prioritaria» del tercer raíl, que facilitará la conexión con el ancho europeo de pasajeros y mercancías y cuyas obras se han vuelto a retrasar de forma oficial y no estarán terminadas hasta finales de abril. «La conexión en ancho europeo, con la solución provisional del tercer carril, debe finalizarse de forma inmediata porque los exportadores no pueden esperar más», aseguró Félix.
De hecho, recordaron que hoy por hoy los tiempos de entrega son un factor «determinante» para sus clientes europeos por lo que el anunciado retraso en las obras ha puesto al sector en alerta ya que puede suponer «un grave contratiempo para mantener a sus clientes en Europa».
Este tercer carril se proyectó como un embrión provisional del corredor mediterráneo y una alternativa más económica de la doble plataforma -una para pasajeros y otra para mercancías-. El objetivo es que los trenes de mercancías tengan conexión directa con Europa a través de ester tercer raíl una vieja reivindicación necesaria para impulsar la exportación de bienes pero también como plataforma para mejorar las cifras de llegada de turistas.
Una obra imprescindible
En este sentido, y teniendo en cuenta que tanto el corredor mediterráneo como el eje mediterráneo-cantábrico son «imprescindibles para potenciar el turismo y la actividad exportadora» de la Comunitat, los participantes coincidieron en la necesidad de incrementar la estrategia «de presión» para convencer al Gobierno central de su importancia.
Boira aseguró que el ministerio sigue invirtiendo «escasamente en el corredor, cinco veces menos que el de Zamora-Orense», pese a que, a su juicio, la infraestructura es «clave para las exportaciones valencianas, las segundas de toda España, con gran peso del sector de la agroalimentación».
Las obras, que han de llevar también la alta velocidad hasta Castelló, tenían que haber terminado en diciembre de 2015, plazo que ya se ha superado. Según se dio a conocer en enero, la nueva fecha de finalización para Renfe es el 30 de abril.
