El Senado va a reenviar al Tribunal Supremo el escrito que ha recibido del Juzgado de Instrucción 18 de Valencia en el que pregunta por la condición de senadora de Rita Barberá. La Cámara Alta entiende que el escrito debió enviarse directamente al alto tribunal para conocer si la exalcaldesa está o no aforada. El vicepresidente primero de la Mesa del Senado, Pedro Sanz, explicó en rueda de prensa que «no corresponde al Senado contestar» al juzgado que investiga el blanqueo de capitales en el Ayuntamiento de Valencia, sino que es el Supremo el encargado de ese trámite. El alto tribunal cuenta con la lista actualizada de diputados y senadores puesto que le corresponde a él llevar cualquier causa en la que estos estén implicados.

En los próximos días, el Supremo recibirá el escrito del Senado y tendrá que responderle al juzgado valenciano que, efectivamente, Barberá está aforada. Será entonces cuando el Juzgado de Instrucción 18 de Valencia comunicará al Alto Tribunal los indicios de delito que considera existen contra Rita Barberá. Un trámite similar se seguirá en el caso de Miquel Domínguez. Tras recibir la confirmación de las Corts de su condición de diputado y aforado, el juzgado remitirá al Tribunal Superior de Justicia (TSJ) los indicios que haya recabado contra el ex edil para que siga investigando a Domínguez. La causa respecto al resto de ediles y asesores del grupo municipal popular seguirá en el Juzgado de Instrucción número 18, según confirman fuentes de la investigación a Levante-EMV. Este reparto se adopta en aplicación de la doctrina del Supremo que ya se aplicó a la investigación del fraude de los ERE en Andalucía, donde se decidió que los senadores Manuel Chaves , José Antonio Griñán y dos aforados más fueran investigados en el Supremo y, el resto, en el Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla.