El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, anunció ayer que el Consell va a reclamar al futuro Gobierno de España que le transfiera la gestión de la red de Cercanías de ferrocarril de la Comunitat Valenciana, como ya tiene Cataluña y otras autonomías.

Puig aseguró que el Consell será igual de exigente aunque el próximo Ejecutivo lo presidan los socialistas y detalló que ni el Administrador de Infraestructuras (ADIF) ni el Ministerio de Fomento, en manos del PP, hizo caso a las reclamaciones valencianas.

Fuentes del Consell indicaron que también reclamará los fondos para la gestión de las Cercanías, ya que la situación económica de la Generalitat hace inviable la asunción de nuevas competencias sin que llegue más dinero.

El presidente autonómico añadió que es necesario reforzar las Cercanías y criticó que, durante años, el Consell del PP destinara dinero a grandes proyectos en lugar de preocuparse por hacer la vida más fácil a las personas.

Asimismo, lamentó que no se haya invertido en Cercanías pese a que se desplaza más gente entre Valencia y Castelló que personas se suben al AVE para ir a Madrid.

El Plan de Cercanías 2010-2020, por el que el Estado se comprometió a hacer una inversión de 3.400 millones de euros, a día de hoy no se ha licitado ninguna iniciativa, mientras que los Presupuestos del Estado solo destinan 12,4 millones, con lo que a ese ritmo «en un siglo» no se cumple el convenio. Puig aseguró que en ese plan la Generalitat tenía que aportar 555 millones de euros, pero no ha licitado tampoco nada, lo que ha supuesto que en los cuatro últimos años «ha empeorado notablemente» la calidad del servicio.

Por su parte, la consellera de Vivienda, María José Salvador, reiteró que el Consell será reivindicativo ante el futuro Gobierno y aseveró tajante que Fomento «toma el pelo» a los valencianos.