El secretario autonómico de Agricultura y Desarrollo Rural, Francisco Rodríguez Mulero, presidió ayer la constitución de la el Comité Valenciano de Control de Organismos Modificados Genéticamente (Cvcomg), encargada de supervisar utilización y comercialización de los organismos modificados genéticamente (OMG).

La comisión, de la que forman parte los directores generales competentes en política interior; consumo; investigación tecnológica; investigación, desarrollo e innovación agropecuaria; alimentación; salud pública y gestión del medio natural, informó favorablemente dos peticiones.

Ambas serán trasladadas a la Comisión Nacional de Bioseguridad, formado por especialistas que tendrán que dar el visto bueno evaluando posibles riesgos antes de que la Generalitat dé una autorización definitiva. Se trata de una solicitud privada presentada por Valgenetic, dedicada a la investigación biogenética sobre cultivos resistentes a diversas patologías.

La otra petición procede de la Universidad Miguel Hernández y agrupa las solicitudes de varias cátedras dedicadas a la investigación. Ambas pertenecen al denominado Grupo 1 o de «organismos de bajo riesgo» y para uso en instalaciones confinadas.

Según fuentes de la conselleria, en la actualidad no existen cultivos transgénicos en parcelas, tal como ocurre en otras comunidades autónomas donde existen plantaciones comerciales de remolacha y las más abundantes de maíz.

Delegación en las autonomías

La normativa delega en las comunidades autónomas el ejercicio de las funciones reguladas en la ley en relación con las actividades de utilización confinada de organismos modificados genéticamente y otorgar las autorizaciones de liberación voluntaria de dichos organismos para cualquier otro propósito distinto del de su comercialización.

Francisco Rodríguez Mulero destacó la importancia para tener un uso controlado y garantizar la salud pública y el medio ambiente al tiempo que se permiten actividades de investigación y desarrollo necesarias para las mejoras tecnológicas.