«En mis 15 años de vida, nunca he sido tan feliz», cuenta Helen una de las 13 alumnas de Secundaria del colegio católico bilingüe Cumbres School de Moncada que han donado su pelo con el objetivo de recaudar fondos para que la ONG Juegaterapia construya parques infantiles en las azoteas de los hospitales de niños con cáncer. Tras montar dos de estas instalaciones lúdicas, en La Paz y el 12 de Octubre de Madrid, el próximo reto es abrir otro en La Fe.

«En un principio nos íbamos a cortar el pelo diez alumnas y yo», relata Olga Quiñones, responsable de voluntariado de Cumbres School, pero al llegar a la peluquería Pilar Masdemont de Valencia, «y ver la emoción que sentían, tres de las niñas que nos acompañaban me pidieron que les midiera sus coletas para ver si les llegaban a los 25 centímetros reglamentarios».

La peluquería se cerró para atender sólo a las alumnas de Cumbres. «La emoción estaba a flor de piel, y las chicas vivían esa lucha entre el deseo de mantener su melena y el pensar en los niños enfermos, y al final, las tres acompañantes también se la cortaron», relata la docente.

«Esa tarde fue uno de los momentos más mágicos que he vivido. Yo fui la primera en cortarme el pelo por lo que pude observarlo todo, se podía respirar la alegría en las niñas, en las peluqueras... La alegría de saber que tu pequeño esfuerzo es una sonrisa asegurada, no sólo en la cara de un niño enfermo, sino también en la de su madre», añade.

«Fue una tarde increíble? la alegría de poder ayudar, tanto de las peluqueras cortando el pelo como de nosotras donándolo, lo inundó todo», detalla la profesora. «Siempre gana más él que da que el que recibe, porque la recompensa es la alegría del corazón», subraya.

Aplausos de las compañeras

Al día siguiente, ya en el colegio, las 13 niñas tuvieron el aplauso de todas las compañeras, y su ejemplo ha cundido. El colegio informa que el próximo mes de mayo otro grupo de alumnas irá a donar su coleta a la peluquería. «Nuestras alumnas han demostrado, una vez más, su empatía con los niños que pasan dificultades», concluye Olga Quiñones.

El centro de enseñanza privado Cumbres School es el único colegio católico y bilingüe de Valencia. Forma parte de la red de siete colegios que tiene en España Regnum Christi, el Reino de Cristo. Este movimiento eclesial internacional católico impulsado por la congregación religiosa de sacerdotes Legionarios de Cristo dispone de 170 colegios repartidos por todo el mundo y 14 universidades, entre ellas, la Universidad Francisco de Vitoria de Madrid.