El exgerente de Imelsa Marcos Benavent sigue investigado (imputado) tras haber declarado durante dos horas ante el juez que instruye la causa por supuestos delitos en la empresa pública dependiente de la Diputación de Valencia.

Según informa el Tribunal Superior de Justicia valenciano, Benavent ha sido citado por el instructor para ratificar en sede judicial la última declaración que hizo ante la Guardia Civil.

Esta última tuvo lugar el pasado 1 de febrero, a cuyo término declaró a los periodistas que no estaba arrepentido de haber denunciado las supuestas irregularidades en la gestión del PP de Valencia y que recomendaba a los que estaban siendo llamados a declarar que hicieran lo mismo.

Benavent, autor de las horas de grabaciones que se analizan en este caso, fue una de las personas que declararon ese día ante la Guardia Civil por la operación Taula derivada del caso Imelsa, en el que se investiga una supuesta trama de corrupción en varias administraciones públicas valencianas.

En su primera aparición pública desde el pasado mes de mayo, cuando aseguró entonces a los medios de comunicación que era un "yonqui del dinero" y que iba a "hacer mucho daño" tras un vistoso cambio de imagen, el pasado 1 de febrero se le vio bastante más delgado que hacía ocho meses pero con la misma estética (ropa ancha, pelo largo y canoso y con pendientes).

El que fuera gerente de esta empresa pública de la Diputación de Valencia de 2007 a enero de 2015, y quien ha colaborado en las investigaciones desde el pasado mes de mayo, comentó que parte de la declaración consistió en corroborar lo que ya había dicho con anterioridad y que no sabía cuál será el desarrollo del caso: "Depende de la Justicia, pero hay materia", dijo.