Tanto la consellera de Sanitat, Carmen Montón, como su homólogo, Sebastián Celaya instaron en la reunión al Gobierno a convocar el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud para fijar las compensaciones económicas a las autonomías por este tipo de asistencias cruzadas. Estas compensaciones estaban previstas en el Fondo de Garantía Asistencial (FOGA) que ha quedado «paralizado por el cambio de Gobierno», según expresaron ayer.

Montón aseguró que si este órgano «toma decisiones en otros ámbitos», también debería hacerlo en «asistencia sanitaria y atención en las áreas limítrofes» porque «no puede mirar para hacia otro lado».

«Por nuestra parte tendremos las reuniones bilaterales, pero el Gobierno en funciones no se puede abstraer de poner orden en esta situación», remarcó.

Actualmente la conselleria sí tiene activo el convenio con Castilla la Mancha que se renovó en septiembre de 2013 y beneficia a residentes de veintidós localidades de la provincia de Cuenca, más de 6.900 ciudadanos que, por cercanía, son remitidos al hospital de Requena y a más de 8.600 residentes del Valle de Ayora.