El sindicato Manos Limpias, personado como acusación popular en el marco del caso Nóos, pedirá al tribunal encargado de juzgar la causa que deduzca testimonio contra la exalcaldesa de Valencia Rita Barberá al considerar que, durante su declaración como testigo, «faltó a la verdad» en relación a su papel en las negociaciones de los denominados Valencia Summit. La letrada que representa a la entidad, Virginia López Negrete, recordó cómo el exsocio de Iñaki Urdangarin, Diego Torres, dio suficientes detalles en torno a la presunta implicación de Barberá en este asunto, al aludir a una reunión en el Palacio de la Zarzuela entre la exalcaldesa, el expresidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps y los dos exresponsables del Instituto Nóos.

En su declaración, la senadora reconoció que se reunió en su despacho con Urdangarin y Torres para negociar el impulso de unas jornadas «paralelas» a la Copa del América -las Valencia Summit- aunque defendió que su intervención finalizó ahí. «Ayer [por el martes] se faltó a la verdad y hay que tomar medidas de los falsos testimonios», aseveró la abogada, quien recalca que «la gente debe tener respeto y la obligación de decir la verdad; si no, hay consecuencias». López Negrete precisa que procesalmente el momento de pedir que se deduzca testimonio es en la recta final del juicio, en la fase de conclusiones, y apunta que no sabe si la Fiscalía también actuará en este sentido, «pero yo sí».

Barberá explicó que en el encuentro con Urdangarín «no se concretó nada y eran más que nada ideas», negando de forma tajante que no negoció nada acerca del precio de las jornadas.

A preguntas del Fiscal Anticorrupción Pedro Horrach, la testigo, recordó cómo Urdangarin le propuso «traer expertos del mundo para hablar de la ciudad en el marco de la Copa del América», por lo que Barberá le recomendó que abordase el asunto con la Ciudad de las Artes y las Ciencias (Cacsa) y la Fundación Turismo Valencia Convention Boureau (FTVCB).