­Los autores de la memoria editada por la Fundación BBVA y el IVIE „Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas„ han detectado y denunciado en la página 85 de su análisis de 2015 la práctica de «guardar facturas en el cajón» en la contabilidad valenciana. Según este informe, «durante los últimos años de expansión y los primeros de crisis, algunas comunidades acumularon deudas ante proveedores no reconocidas en la contabilidad (lo que se conoce coloquialmente como «guardar facturas en el cajón»). Esta práctica fue importante en el ámbito de la sanidad en algunas comunidades, especialmente en la Comunitat Valenciana», subrayan los autores. La monografía Servicios públicos, diferencias territoriales e igualdad ha sido dirigida por Francisco Pérez García y realizada por Vicent Cucarella Tormo y Laura Hernández Lahiguera. La creación posterior de instrumentos como el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) y el Fondo para la Financiación del Pago a Proveedores (FFPP), relatan estos tres especialistas, «ha permitido que estos gastos se hayan reconocido en ejercicios posteriores a los que realmente se prestó el servicio».

Cabe recordar que el Consejo Europeo impuso en julio de 2015 una multa a España de 18,93 millones de euros por «negligencia grave» al no registrar determinados gastos sanitarios en la contabilidad pública de la Comunitat Valenciana, lo que provocó «una tergiversación» de los datos de déficit público remitidos en 2012 a Eurostat. El actual ejecutivo de Ximo Puig se niega a pagar esa multa y culpa de guardar las facturas en el cajón a Francesc Camps y Alberto Fabra.