Las prestaciones económicas para gastos de manutención de las familias acogedoras de menores van a pasar de ser una subvención que dependía de la disponibilidad presupuestaria y que había que pedir cada año, a una ayuda directa a todas las personas que cumplan los requisitos previstos.

Así lo anunció ayer la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, en la rueda de prensa posterior al pleno, en el que se aprobó el decreto que regula las prestaciones para hacer frente a los gastos de mantenimiento de los menores acogidos, y a los costes indirectos por la disponibilidad en los acogimientos especializados y de urgencia.

Los requisitos para acceder a las prestaciones económicas son acoger a un menor que se encuentre bajo la guarda o la tutela de la Generalitat, y que el acogimiento esté constituido legalmente y no tenga carácter preadoptivo. Se consideran gastos de manutención los de alojamiento, alimentación y vestido, así como los destinados a la educación de los menores acogidos.

El decreto simplifica la tramitación de estas prestaciones, al no estar la solicitud sujeta a un plazo de presentación determinado, mientras que los créditos que se conceden se consideran ampliables, de forma que si la cantidad consignada es insuficiente para atender las solicitudes se generarán nuevos créditos.

«En este momento los derechos de las familias no dependen del presupuesto, sino que el presupuesto se adapta al derecho de las familias», aseveró Oltra, quien garantizó que una vez las familias que cumplan los requisitos soliciten por primera vez la prestación, no tendrán que volver a pedirla cada año.

La vicepresidenta aseguró que se han incrementado en los presupuestos de este año las ayudas por acogimiento familiar en sus diferentes modalidades, de forma que la cuantía se aproxime a los costes reales de la atención.